Conciliación de la medicación al ingreso en pacientes mayores de 75 años

Zusammenfassung

El proceso de conciliación de la medicación es considerado por diferentes organismos nacionales e internacionales como un estándar de calidad dentro de los centros sanitarios y una herramienta para garantizar la seguridad del paciente. De este modo se implanta este proceso en pacientes mayores de 75 años ingresados en el hospital, llevándose a cabo la detección y clasificación de las discrepancias encontradas entre la medicación crónica del paciente y la medicación prescrita en la orden médica. También se analizan aquellos factores de riesgo que pueden estar relacionados con la presencia de errores de conciliación, su gravedad y los grupos farmacoterapéuticos implicados. Por otro lado, se identifican y analizan las prescripciones potencialmente inadecuadas según criterios STOPP así como las interacciones farmacológicas en este grupo de pacientes. El número total de pacientes conciliados fue 507, de los cuales aproximadamente el 60por cien fueron mujeres. Se detectaron 1.701 discrepancias en el 90,93por cien de los pacientes, la mayoría de ellas (66,43por cien) no necesitaron aclaración con el médico, por lo que fueron justificadas desde el inicio del proceso, el resto de discrepancias se repartieron en errores de conciliación (35,73por cien), discrepancias que fueron justificadas tras hablar con el médico (14,01por cien) y discrepancias no resueltas (50,26por cien). La discrepancia justificada principal fue la decisión médica de no prescribir un medicamento en base a la nueva situación clínica del paciente. Por otro lado, la discrepancia no justificada o error de conciliación más frecuente fue la omisión de un medicamento crónico que el paciente necesitaba en el momento de su ingreso. Se observó relación entre la presencia de errores de conciliación y los pacientes que tomaban 5 ó más medicamentos, no así con otros factores como la edad, sexo, patologías concomitantes, servicio de ingreso, existencia de alergias o intolerancias y número de fármacos evaluados. Los grupos farmacoterapéuticos más afectados por estos errores pertenecieron al sistema nervioso, cardiovascular y digestivo. El 72,06por cien de las discrepancias no justificadas correspondieron a gravedad de categoría C, el 25,98por cien hubiera requerido intervención o monitorización para prevenir el daño y el 1,96por cien hubiera causado daño temporal en el paciente. Las prescripciones potencialmente inadecuadas afectaron al 12,23por cien de los pacientes conciliados y la más prevalente fue la pauta de ácido acetilsalicílico a dosis superiores a 150 mg al día. El porcentaje de aceptación de las recomendaciones realizadas teniendo en cuenta los criterios STOPP fue del 43,08por cien. El número de interacciones con repercusión clínica fue de 110, afectando al 18,54por cien de los pacientes, la mayoritaria fue la combinación de Clopidogrel con Omeprazol y la aceptación fue del 51,82por cien. La inclusión del proceso de conciliación dentro de las actividades del servicio de Farmacia ha permitido detectar la existencia de discrepancias entre el tratamiento crónico del paciente y el prescrito en el hospital en el momento del ingreso. La mayor parte de las discrepancias fueron justificadas pero un 35,73por cien correspondieron a errores de conciliación, asociados a la presencia de 5 ó más fármacos crónicos. La mayoría de estos errores no hubieran provocado daño pero más de un 27por cien fueron de categoría D y E. Los criterios STOPP aplicados a este grupo de pacientes han permitido conocer las prescripciones potencialmente inadecuadas más frecuentes. El análisis de las interacciones farmacológicas muestra las combinaciones de fármacos que deben ser evitadas en estos pacientes.