Eugenio de Ochoa (1815-1872)el hombre de letras en la España de Isabel II

  1. SANCHEZ GARCIA, RAQUEL
Dirigida por:
  1. Joaquín Álvarez Barrientos Director/a
  2. Eugenia Popeanga Chelaru Directora

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 15 de octubre de 2015

Tribunal:
  1. Carmen Mejía Ruiz Presidenta
  2. Dolores Romero López Secretaria
  3. José María Ferri Coll Vocal
  4. Raquel Gutiérrez Sebastián Vocal
  5. Ana Peñas Ruiz Vocal
Departamento:
  1. Lingüística, Estudios Árabes, Hebreos, Vascos y de Asia Oriental

Tipo: Tesis

Resumen

Eugenio de Ochoa nació en Lezo (Guipúzcoa) en 1815 y murió en Madrid en 1872. Aunque su primera vocación fue la de escritor, por diversas circunstancias se acabó dedicando a otras actividades como la traducción, la crítica y la edición. Sin embargo, el escaso éxito de sus obras teatrales no evitó que siguiera escribiendo cuentos y poesías. Tuvo amplias relaciones con el mundo literario y artístico de su época. Por todo ello, y aunque se le ha considerado una figura secundaria, tuvo un papel muy significativo en la red de intelectuales, escritores y artistas que construyeron el campo cultural español durante el reinado de Isabel II. La tesis, centrada en el análisis de las prácticas del mundo literario español, estudia su figura desde una perspectiva contextualista a través de dos grandes líneas de análisis: Ochoa como hombre de letras y Ochoa como mediador cultural entre España y Europa. La primera parte del trabajo, titulada ¿Ochoa, hombre de letras¿, se ocupa del estudio de Ochoa como paradigma del hombre de letras en la sociedad liberal. Para ello, se han establecido varios apartados: las circunstancias vitales del escritor; la escritura como profesión; el estudio de su biblioteca; y su relación con la política. El objetivo ha sido insertar su figura en su contexto histórico para presentar el rango de posibilidades vitales que se le ofrecía y las decisiones que fue tomando a lo largo de su existencia. El segundo bloque de este libro parte de la consideración de Ochoa como un agente y mediador cultural en la España de Isabel II a través de su trabajo como traductor, editor, crítico, periodista y viajero. La mayor parte de sus coetáneos y de las menciones que de él hace la bibliografía contemporánea pone el énfasis en este hecho. Finalmente, el trabajo incluye un breve capítulo dedicado a hacer un repaso descriptivo de las obras originales de Ochoa. Dado que el objetivo primordial del estudio prioriza el análisis del sujeto creador en su contexto, el análisis estilístico de sus escritos ha de ocupar aquí un lugar secundario. Las fuentes que han servido de base para este trabajo son muy diversas. Aparte de las obras publicadas tanto por Ochoa como por sus contemporáneos, el recurso a la prensa ha constituido una constante para seguir su trayectoria política y personal, pero también para conocer sus ideas acerca de la literatura. Una buena parte de la obra crítica de Ochoa se halla dispersa por las páginas de los periódicos y revistas del siglo XIX y, aunque tanto su hijo Carlos como Pérez Galdós hablaron de la necesidad de recopilar todos estos artículos, nada se hizo tras su muerte. Un apartado significativo está formado por las fuentes de archivo, complemento indispensable en la reconstrucción de las tramas privada y social. El trabajo de archivo ha permitido conocer más detalladamente su paso por la administración pública, sus relaciones con personajes destacados de su tiempo, su vida familiar, etc. Hay que destacar la importancia de la información de los diversos epistolarios de la familia Madrazo, pues al tratarse de una documentación particular, se ha podido conocer más de cerca a Ochoa en su vertiente personal.