La construcción visual de identidades en la España franquista a través de los medios (1938-1953)

  1. Rosón Villena, María
Dirigida por:
  1. Jesusa Vega Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 20 de junio de 2014

Tribunal:
  1. Carmen Ortiz García Presidente/a
  2. Jesús Carrillo Castillo Secretario/a
  3. Selina Blasco Vocal
  4. Isabel Tejeda Martín Vocal
  5. Nuria Capdevila Argüelles Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

El tema general que ha guiado la presente tesis doctoral es la reflexión y el análisis de cómo las identidades de género se construyeron y recepcionaron en la cultura visual del periodo autárquico en España. La investigación se centra en un marco cronológico que se inicia en 1938, momento bélico en que se diseña el primer gobierno de lo que sería el fututo Estado franquista, donde en el Ministerio del Interior ya se destina un significativo lugar a la propaganda y finaliza en 1953, año en el que régimen comienza a desarrollar su política aperturista firmando con la Santa Sede el Concordato Vaticano el 27 de agosto y a negociar acuerdos con Estados Unidos. Tras la introducción, un estado de la cuestión y una revisión metodológica presente en el primer capítulo, el trabajo se divide en dos partes. La primera de ellas aborda los años que van de 1938 al 1942, tiempo en el que la cultura y las identidades de género elaboradas a través de las prácticas visuales estuvieron confeccionadas por las fuerzas falangistas, en cuyas manos cayó el peso de la propaganda audiovisual desde el final de la guerra. En el intento de construir una propaganda ¿total¿ al modo fascista se legitimaron unos modelos identitarios relacionados con la militarización de la vida, que tuvieron especial impacto en la identidad de los mandos de la Sección Femenina de Falange. Para el análisis de estas cuestiones nos detenemos en los retratos fotográficos de las dirigentes de esta organización diseminados en su primera publicación Y revista para la mujer (capítulo 2). También indagamos en la proyección de estas ideas a través del espacio, la arquitectura y la decoración de su primera y principal el escuela, el castillo de la Mota (Medina del Campo), que después de una importante obra desarrollada en 1939 y 1942 se transformó en la ¿Escuela de Mandos José Antonio¿ (capítulo 3). Para finalizar la primera parte, abordamos las actividades de sus compañeros varones falangistas afiliados al sindicato estudiantil S.E.U en 1941. A través del estudio de un álbum fotográfico que recoge una experiencia estival en un albergue podemos poner en relación el impacto de las identidades de género de posguerra ¿falangistas¿ tanto en hombres como en mujeres y abordar cómo estos se relacionaron con las praxis visuales y materiales (capítulo 4). La segunda parte de la investigación se dedica a la década de 1943-1953, donde con el fin de la segunda guerra mundial se da paso del discurso de militarización a una retórica de ¿despolitización¿ fascista que encuentra cómo marco de representación legitimado el terreno familiar y sus relaciones. Ese lugar tan complejo situado entre lo íntimo y lo público se aborda a través de la experiencia cinematográfica (capítulo 5), donde las personas ¿especialmente la mujeres¿ pudieron encontrar en ella un espacio imaginario y físico de empoderamiento. Especialmente, teniendo en cuenta que durante la década de los cuarenta hubo una gran cantidad de protagonistas femeninas sobresalientes, personajes femeninos positivos como las heroínas de las películas históricas del momento. En este capítulo también estudiamos las noticias de moda presentes en NO-DO, dirigidas a las mujeres y caracterizadas por ofrecer de igual modo modelos diversos y antagónicos al oficial, en este caso caracterizados por la sensualidad y el lujo. Las fotografías personales y sus prácticas sociales y culturales durante el periodo han sido también objeto de nuestro trabajo, desarrolladas en los dos últimos capítulos (6 y 7). Gracias a su estudio podemos valorar el significativo rol que tuvo la fotografía en la vida cotidiana de las gentes como práctica para construir identidades y memorias. Además, gracias al estudio de ¿fuentes¿ subjetivas y encarnadas podremos contar otras historias y ofrecer otro tipo de relatos que difieren de la historia de los vencedores. La tesis doctoral finaliza con unas conclusiones y una bibliografía.