Creación literaria y autobiografía en Manuel Azaña

  1. MARCO TOBARRA JOSE M.
Dirigida por:
  1. Andrés Amorós Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 12 de julio de 2001

Tribunal:
  1. José Luis Abellán Presidente
  2. José Paulino Ayuso Secretario
  3. Antonio Morales Moya Vocal
  4. Elena Catena Vocal
  5. José Ignacio García Gutiérrez Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 82264 DIALNET

Resumen

Manuel Azaña (1880-1940) fue ministro de la Guerra, presidente del Gobierno y jefe del Estado durante la Segunda República española (1931-1936) y la Guerra Civil (1936-1939). También escribió artículos, ensayos y estudios históricos y biográficos. Es autor de dos novelas (El jardín de las frailes y Fresdeval), una obra de teatro (La Corona), y un diálogo (La velada en Benicarló). Además escribió numerosos diarios a lo largo de su vida, en particular las tituladas Memorias políticas y de guerra, escritas durante sus años de gobierno. Del estudio de la obra literaria, de la obra autobiográfica y de la biografía del autor, se deduce que la bora literaria de Azaña está inspirada en su propia vida. Además, los textos autobiográficos, por lo menos hasta las Memorias, sirven de borrador para la obra literaria de Azaña. Tanto la obra autobiográfica como la obra de creación literaria están dirigidas a la creación de un personaje que acaba teniendo una proyección pública importante. Este personaje es una creación voluntaria y consciente del autor, que no duda en variar e incluso falsear su experiencia vital, la historia familiar y la realidad para crearlo. Este personaje no es sólo una máscara social que disimula una intimidad que se quiere velar o disimular. El personaje de Azaña tiene una dimensión colectiva o política. El personaje de Manuel Azaña será sucesivamente símbolo de una crisis nacional (en El jardín de los frailes); símbolo de la crisis del liberalismo (Fresdeval); símbolo de la República (en las Memdorias de 1931-1933); y símbolo, finalmente, de la nación española (La velada en Benicarló y las Memorias de 1937-1939). Finalmente, esta empresa de creación de su propio personaje aclara buena parte de la obra política de Manuel Azaña.