El sector agrario en las relaciones España-Francia durante la transición española. Un condicionante para la adhesión al mercado común, 1975-1982

  1. Molina García, Sergio
Dirigida por:
  1. Manuel Ortiz Heras Director/a
  2. Damián Alberto González Madrid Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Castilla-La Mancha

Fecha de defensa: 31 de octubre de 2019

Tribunal:
  1. Juan Pan-Montojo Presidente/a
  2. Rosa María Pardo Sanz Secretario/a
  3. Matthieu Trouvé Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 601984 DIALNET

Resumen

Durante los años setenta y ochenta, tal y como afirman Tony Judt y Eric Hobsbawn, se produjo un giro en las dinámicas nacionales e internacionales. Esos cambios provocaron transformaciones políticas y económicas con consecuencias que han llegado hasta la actualidad. En aquellos momentos se reactivó la Guerra Fría, lo que provocó un aumento de tensión a ambos lados del Telón de Acero. Al mismo tiempo, comenzaron los primeros debates en el seno de la Comunidad Económica Europea (CEE). Se cuestionó la relevancia que tenía la Política Agraria Común (PAC) en los presupuestos comunitarios y se puso en duda la primera ampliación del Mercado Común, sobre todo tras las exigencias del Gobierno británico a la CEE. En medio de todo ese contexto, los países del sur de Europa iniciaron procesos de democratización, abriendo de esta manera un nuevo capítulo de la historia de Europa. A día de hoy, todavía existen numerosos ángulos ciegos sobre la relevancia de los cambios que se produjeron en esos años. Una de las transformaciones más importantes en la CEE fue su segunda ampliación con la entrada de Grecia (1981), España y Portugal (1986). Los procesos de integración han sido estudiados desde un punto de vista nacional para conocer cómo afectó la integración comunitaria a las propias dinámicas internas de cada país. Sin embargo, en pocas ocasiones se han analizado esas integraciones desde otras perspectivas. Esta investigación pretende analizar la relación franco-española sobre cuestiones agrarias durante el periodo de la transición española (1975-1982) y conocer su impacto en las negociaciones para la integración española en el Mercado Común. Tras la muerte del dictador Franco, en España se inició un proceso de tránsito hacia la democracia. Además de celebrar elecciones y de aprobar una constitución, no sin dificultades, el Gobierno de la UCD trató de normalizar su situación internacional. Para ello, el principal objetivo fue la integración en la CEE. En esos mismos momentos, Francia estaba intentando minimizar el impacto de la crisis del petróleo (1973) y mantener una posición privilegiada en la CEE. En ese contexto, la democratización de España generó nuevos debates en las instituciones comunitarias y en la opinión pública de Francia. Aunque la instauración de un sistema de libertades fue defendida por gran parte de la sociedad francesa, el miedo a que la agricultura española sustituyera al sector primario francés provocó un debate en ese país. En ambos Estados, y no solo en Francia, se extendieron discursos en los que se promovió un “nosotros” contra “ellos”. Al norte de los Pirineos esas tesis sirvieron para argumentar su posición reticente sobre la incorporación de España al Mercado Común. Y al sur de los Pirineos, el discurso utilizado sirvió para justificar los retrasos en la incorporación a la CEE. Gran parte de la sociedad de los dos países todavía recuerda los boicots a los productos primarios a ambos lados de la frontera y las declaraciones de algunos líderes políticos. La inexistencia de análisis específicos sobre el debate agrario ha provocado que la concepción ciudadana de los conflictos agrarios se cimente en algunos mitos y recuerdos. Esta investigación aspira a dar respuesta a la necesidad social de conocer la transcendencia de los debates agrarios francoespañoles y su relevancia para la integración española a la CEE. Ante esta situación, se espera averiguar si realmente la competencia agraria entre ambos países era real, o si fue una invención social y política en busca de ciertos intereses nacionales. Para ello, se van a comprar las producciones, las exportaciones y los precios de los productos agrarios de España y de Francia, se va a buscar el origen de los discursos contra la agricultura española y francesa, se va a analizar el papel que tuvo el asociacionismo agrario y se va a prestar especial atención al uso político que se hizo de esta cuestión en ambos Estados. Todo ello vinculado a los debates sobre las extradiciones de ETA y a las cuestiones de cuotas de pesca, temas que enfrentaron igualmente las dos diplomacias. Una vez conocido el alcance de la cuestión a nivel bilateral, se estudiará el impacto en terceros países para demostrar que fue una controversia que afectó tanto al conjunto de la CEE como a otros estados no europeos. El punto de partida desde el plano teórico se ha encontrado en la escuela francesa de las relaciones internacionales. Robert Frank y Jean-Baptiste Duroselle argumentaron que los estudios sobre las relaciones internacionales no podían reducirse a análisis sobre la diplomacia, sino que era necesario ampliar los objetos de estudio a otros sujetos. El protagonismo compartido del que hablaban los autores anteriores, junto con las necesidades del propio planteamiento de esta investigación, han sido las razones por las que se han utilizado diferentes recursos metodológicos. La historia económica y agraria ha permitido comprobar la inexistencia de una verdadera competencia económica, la historia social ha sentado las bases para analizar el papel de la sociedad civil en el debate bilateral y la historia política ha servido para interpretar las claves del uso que hicieron los partidos y sindicatos de esta cuestión. Todo ello relacionado con la historia de las relaciones internacionales, disciplina que ha puesto de manifiesto las funciones de la diplomacia y la diversidad de factores que intervienen en las conversaciones y negociaciones entre varios países. El objeto de estudio no había sido analizado en profundidad hasta este momento y eso ha provocado que el pilar de la investigación hayan sido las fuentes primarias. La mayoría de los documentos proceden de fondos conservados en Francia y en España, aunque también se han consultado otros archivos localizados en Bruselas, Luxemburgo o Florencia. Las entrevistas orales han sido de gran ayuda para complementar los legajos conservados en papel. Todo ello está apoyado en una extensa bibliografía sobre cuestiones relacionadas con los debates agrarios franco-españoles. En resumen, este trabajo permitirá, a través de una problemática bilateral, conocer nuevas claves para comprender las dificultades de la CEE y el alcance del conflicto agrario franco español. La problemática bilateral se convirtió en un affaire nacional en ambos países y alteró la agenda comunitaria, pues no hay que olvidar que la PAC era uno de los emblemas de la CEE.