Actos de habla en procesos de la Inquisición española

  1. Alonso Calvo, Sara
Dirigida por:
  1. Emilio Ridruejo Alonso Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Valladolid

Fecha de defensa: 24 de enero de 2014

Tribunal:
  1. Juan Felipe García Santos Presidente/a
  2. Nieves Mendizábal de la Cruz Secretario/a
  3. Ricardo Escavy Zamora Vocal
  4. Miguel Angel Esparza Torres Vocal
  5. María José Martínez Alcalde Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Aunque la Inquisición española se ha estudiado desde diferentes puntos de vista, y los procesos inquisitoriales han sido objeto de interés de filólogos, historiadores¿ y sociólogos, el análisis de los procesos inquisitoriales desde el punto de vista pragmático sólo ha sido llevado a cabo de forma somera en el trabajo de Ebenez y de la Torre de 2003. Debido a ello, quedaba mucho por analizar desde el estudio pragmático y aún más desde el estudio de los actos de habla. Este trabajo intenta rellenar esa laguna analizando los actos de habla que aparecen en los procesos de la Inquisición Española. La Inquisición Española aporta ejemplos de una nómina de actos de habla amplia, pero definida, que incluye algunos actos que apenas habían sido estudiados hasta el momento. Los objetivos de la tesis son: - Analizar, según la Teoría Componencial desarrollada por de Searle y Vanderveken [1985] y Vanderveken [1990], los actos de habla que tienen importancia en el desarrollo del proceso inquisitorial; - Caracterizar las fuerzas ilocutivas de esos actos de habla en relación con sus fuerzas ilocutivas más cercanas, utilizando procedimientos de la filosofía del lenguaje; y - Observar cómo aparecen en el corpus utilizado los actos de habla caracterizados teóricamente, e identificar su uso así como sus problemas de clasificación e identificación al ser analizados en un lenguaje no ideal y en un contexto histórico. La base teórica de este trabajo está formada por varias corrientes teóricas: - La primera es la teoría de los actos de habla, a la que se ha querido dar un repaso desde sus primeros autores Wittgenstein y Austin. De este campo de estudio se han utilizado, sobre todo, la teoría componencial y las clasificaciones de actos de habla realizadas por Searle y Vanderveken en 1985 y Vanderveken en 1990. También se ha utilizado el análisis de Wierzbicka de 1987. Se ha utilizado esta última clasificación, que procede de la semántica y no de la filosofía del lenguaje como las anteriores, porque aporta información sobre cómo se relacionan los actos de habla entre sí. Algo que ya había apuntado Wittgenstein en su trabajo de 1953. - La segunda es la teoría de la enunciación que, mediante el análisis pragmático de la conversación, aporta información extra sobre cómo entender la fuerza ilocutiva final de un acto de habla, más allá de la fuerza ilocutiva pretendida por el hablante. - La tercera es el análisis del coloquio con el que, partiendo de la idea de que los actos de habla no se producen de forma aislada, se analiza cómo los actos de habla se articulan a lo largo del discurso creando los procesos judiciales inquisitoriales objeto de este estudio. - Finalmente, aunque a modo de corolario, se utiliza la construcción del contexto de la que hablan varios autores, ya que los actos de habla se producen en un contexto determinado que puede modificar parte de su fuerza ilocutiva. Como nuestro corpus es histórico, lo hemos llamado reconstrucción, ya que intentamos recuperar un contexto de enunciación perdido por circunstancias diversas. El objetivo primario del análisis es el estudio de 6 fuerzas ilocutivas de tipo ritual jurídico (acusar, jurar, testificar, alegar, abjurar, sentenciar); 10 fuerzas rituales religiosas (rezar, bendecir, casarse, predicar, bautizar, blasfemia y herejía, jurar y blasfemar, hechizar, solicitar); y 7 fuerzas naturales o no rituales (amenazar, burlarse, enseñar, lamentar, quejarse, criticar y descalificar) que atendiendo a la división primaria clásica se pueden dividir en 8 fuerzas ilocutivas de tipo directivo, 6 declarativas, 8 asertivas, 6 expresivas y 2 comisivas. Estudiando también las fuerzas ilocutivas cercanas, se puede llegar a una serie de esquemas de entrañamiento, en los que, siguiendo la teoría componencial, cada fuerza ilocutiva está compuesta por aquellas que la preceden en la cadena y alguna otra característica más. Estos esquemas se han realizado siguiendo los diagramas para los verbos ingleses de Vanderveken de 1990, que amplían los realizados por Searle y Vanderveken en 1985. Dado el objeto de estudio de este trabajo, la nómina final difiere de la utilizada por estos autores. Los esquemas realizados, que incluyen más verbos que cualquier otro trabajo sobre el español, no dejan de ser arbitrarios y pueden cambiar a discreción del investigador si considera que la combinatoria de elementos que llevan a la formación de estas fuerzas ilocutivas es diferente. El análisis de las fuerzas ilocutivas y la elaboración de estas cadenas nos han llevado a las siguientes conclusiones teóricas: En primer lugar, se han localizado los desajustes entre verbos realizativos y fuerzas ilocutivas identificados por Searle [1979]: - Existen, por una parte, verbos realizativos que no poseen una fuerza ilocutiva plena y que solamente hacen referencia a un componente de la fuerza ilocutiva, como es el caso de bendecir o maldecir; - Por otra parte, verbos que poseen una fuerza ilocutiva plena y también hacen referencia a un componente de otra fuerza ilocutiva, como es el caso de blasfemar (blasfemia heretical y blasfemia expresiva); - Y, finalmente, verbos que tienen más de una fuerza ilocutiva tengan estas el mismo punto ilocutivo, como acusar; o dos o más puntos ilocutivos diferentes, como es el caso de rezar o jurar. En segundo lugar, se han encontrado varios problemas relacionados con la institucionalización de los actos de habla a los que no se hacía referencia en la bibliografía consultada: - Se ha observado, por un lado, que existe la posibilidad de que dos organizaciones puedan aportar restricciones en la realización de un mismo acto, produciéndose una institucionalización doble, que puede alternarse con una simple. Esta alternancia se debe a que uno de los sistemas de normas es considerado esencial para que el acto sea aceptado socialmente como exitoso y el otro no. Estos casos pueden evolucionar con las instituciones a lo largo de la historia. Este es el caso de casarse. - Por otro lado, se ha observado la posibilidad de que la institucionalización sea directa o indirecta. La institucionalización directa, modifica los elementos constitutivos de la fuerza ilocutiva y sus condiciones de realización; mientras que la institucionalización indirecta, hace que los componentes de la fuerza ilocutiva no tengan condiciones de satisfacción que se excluyan mutuamente. Este es el caso de jurar. Finalmente, al realizar el análisis de verbos realizativos, se han observado, con respecto a clasificaciones teóricas previas, dos cuestiones importantes: - Por una parte, la dificultad de clasificación de los verbos realizativos y de sus fuerzas ilocutivas debido a la falta de clasificaciones previas para el español. Las clasificaciones existentes son para verbos ingleses y resultan defectivas a la hora de aplicarse a otras lenguas. Entre los verbos que necesitaban una reclasificación pueden citarse: Testificar, jurar y rezar. - Por otra parte, la necesidad de analizar la fuerza ilocutiva de verbos realizativos no analizados en profundidad hasta el momento. Entre estos verbos puede citarse casarse, que en trabajos clásicos como en el de Austin es considerado declarativo, pero del que no llega a realizarse una descripción pormenorizada. Recapitulando los puntos más importantes de este trabajo: - Se han analizado desde un punto de vista teórico un total de 128 fuerzas ilocutivas y se han clasificado atendiendo a sus componentes. - Se ha analizado el funcionamiento del Tribunal de la Inquisición desde un punto de vista lingüístico y pragmático. - Se han analizado algunos actos rituales de carácter religioso desde el punto de vista lingüístico. - Al tratarse de textos históricos, se ha analizado la posibilidad de que haya fuerzas ilocutivas que existan antes de tener un verbo realizativo que las represente, hecho que queda especialmente patente con las fuerzas ilocutivas cercanas a burlarse, que sólo aparecen en el texto representadas por un único verbo, mientras que en la actualidad se representan con varios verbos ilocutivos como burlarse, mofarse, ridiculizar y bromear. - Y, finalmente, se ha comprobado, como es un hecho conocido, que la barrera entre fuerzas ilocutivas se desdibuja ante la falta de contexto, no sólo entre fuerzas cercanas, sino también entre fuerzas que comparten un rasgo ilocutivo. Por tanto, se ha comprobado la importancia del contexto y su falta en el análisis de los verbos realizativos, sobre todo en aquellos de carácter no institucional. Con este trabajo se pretende contribuir al estudio de los actos de habla desde una perspectiva interdisciplinar aplicada a textos reales, lo que se aleja de los trabajos clásicos que teorizaban sobre las fuerzas ilocutivas en un lenguaje teórico e ideal. Este trabajo puede resultar un punto de partida para estudios sobre los procesos judiciales actuales, pudiendo tener una aplicación práctica también en dichos procesos. También puede resultar útil para realizar estudios comparativos de los mismos actos rituales en varias religiones. Finalmente, podría utilizarse como referencia en estudios de los actos de habla en corpus actuales del español.