Epidemiología de "Borrelia burgdorferi s l" (enfermedad de Lyme) en un ecosistema de pinar de montaña supramediterráneo

  1. Caride Villaamil, Elena
Dirigida por:
  1. Alfredo Solana Alonso Director
  2. José Alberto Rodríguez Rodríguez Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 15 de julio de 2002

Tribunal:
  1. Angel Sánchez Covisa de Villa Presidente
  2. María Isabel Simarro Fernández Secretario
  3. Agustín Estrada Peña Vocal
  4. José Vicente Saz Pérez Vocal
  5. Carmen del Águila de la Puente Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

El riesgo de adquisición de determinadas enfermedades, como aquellas transmitidas por garrapatas, ha aumentado en los últimos años, debido al mayor contacto del hombre con la naturaleza y los animales domésticos y silvestres. Una de estas enfermedades, la borreliosis de Lyme, ha sufrido un considerable incremento en el número de casos diagnosticados en España. En este trabajo hemos estudiado el posible riesgo de contacto del agente de la enfermedad de Lyme (Borrelia burgdorferi sensu lato) con la población humana y animal que frecuenta la Sierra de Guadarrama, hábitat en el que coexisten los vectores y reservorios potenciales de esta espiroqueta. Para ello, realizamos un estudio serológico utilizando distintas técnicas, validando la más específica. Asimismo, quisimos conocer la prevalencia de los vectores potenciales y comprobar la importancia de los micromamíferos como reservorios de la bacteria. La seroprevalencia encontrada en la población estudiada fue muy superior con técnica de uso rutinario como son la IFI y el ELISA que la hallada al utilizar métodos más específicos como el inmunoblot, por lo que se concluyó que fueron debidas a reacciones cruzadas, siendo la técnica de elección esta última. El ciclo estacional de Ixodes ricinus dura dos años, siendo el único periodo de riesgo para el hombre el de la actividad de las ninfas, que sería la primavera o, según la humedad, el verano. Con respecto a los roedores, se vio que, tras la infección experimental, la respuesta humoral es muy intensa, pero en la naturaleza no se encuentra infección en ellos, debido al bajo de infestación que presentan, gracias a la abundancia de largartijas en la zona, que alimentan gran cantidad de estadios inmaduros del vector. Por lo tanto, podemos concluir que, aunque en la Sierra de Guadarrama concurren todos los elementos para que se mantenga el ciclo enzoótico del agente de la enfermedad de Lyme, la intensidad de transmisión durante el periodo de estudio es los suficientemente bajo para que no constituya un riesgo en la población que visita la zona