Un modelo de intervención desde el servicio de microbiología en la alerta precoz de la sepsis

  1. Bunsow, Eleonora
Dirigida por:
  1. Emilio Bouza Santiago Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 30 de junio de 2014

Tribunal:
  1. José Prieto Prieto Presidente
  2. Patricia Muñoz García Paredes Secretario/a
  3. María Guembe Ramírez Vocal
  4. Emilio Maseda Garrido Vocal
  5. Javier Cobo Reinoso Vocal
Departamento:
  1. Medicina

Tipo: Tesis

Resumen

La sepsis es uno de los mayores desafíos de la medicina contemporánea, siendo hoy en día un importante problema sanitario debido a su alta incidencia, morbilidad y mortalidad. La atención temprana de la sepsis es un estándar de cuidado en muchas instituciones y el papel de los diferentes especialistas es bien reconocido. Sin embargo, el impacto de una llamada telefónica por parte de un especialista en Microbiología Clínica al momento de la llegada de los hemocultivos al Servicio de Microbiología no ha sido evaluado. Los objetivos de esta tesis fueron los siguientes. 1) Valorar el conocimiento de sepsis del personal médico y de enfermería que atiende a pacientes cuyos hemocultivos acaban de ser enviados al Servicio de Microbiología; 2) Evaluar si se han llevado a cabo, antes de la llamada telefónica, las medidas diagnóstico-terapéuticas adecuadas a juicio de un entrevistador médico del Servicio de Microbiología; 3) Valorar la necesidad de consejo diagnóstico y terapéutico de sepsis por parte del personal médico; 4) Medir el impacto diagnóstico de una intervención precoz de sepsis realizada por un entrevistador médico del Servicio de Microbiología. Para llevar adelante estos objetivos se realizaron llamadas telefónicas seguidas de una entrevista a los médicos y enfermeras a cargo de los pacientes cuyos hemocultivos habían sido recibidos en el Laboratorio de Microbiología en el Hospital Gregorio Marañón. Los pacientes fueron clasificados al azar en el grupo A (llamado telefónico realizado) y Grupo B (sin llamado telefónico). Se incluyeron 300 pacientes en el estudio. La sepsis fue reconocida inmediatamente por el 30,3 por ciento de las enfermeras y el 50 por ciento de los médicos. Consejos para optimizar el uso de las pruebas bioquímicas y microbiológicas fueron proporcionados en el 36 por ciento de los casos y para mejorar la terapia antimicrobiana en el 57,6 por ciento. El porcentaje de seguimiento de las recomendaciones fue alto. La mediana de días de uso de antibióticos en los grupos A y B, respectivamente, fueron 6 días [IQR: 2-12] frente a 9 días [IQR: 4-16] p=0,008 y el número medio de la dosis diaria prescripta de antimicrobianos fue de 6 [IQR: 3-17] en el Grupo A frente a 10 [RIC: 5-22] en el grupo B; p= 0,016. Se encontró una reducción de 40 euros/paciente/día sólo en el consumo de tratamiento antimicrobiano en el grupo A. A modo de conclusión, una llamada telefónica con el asesoramiento de un médico especialista en Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas inmediatamente después de la llegada de los cultivos de sangre en el Departamento de Microbiología mejora el uso de los recursos de diagnóstico y reduce el consumo de antimicrobianos y gastos en el manejo de los pacientes con sospecha de sepsis.