La marca "Alfred Hitchcock" en los "trailers" de sus largometrajes entre 1955 y 1965

Resumen

Alfred Hitchcock es uno de los directores más conocidos y con mejor reputación de toda la Historia del Cine. Pero su notoriedad no se debe únicamente a la calidad de su obra, sino también a que construyó una auténtica marca comercial alrededor de su nombre y sus películas. Una marca representada por su propia figura oronda, con su logotipo y sintonía musical, así como un eslogan que ha perdurado hasta hoy: ¿El Maestro del Suspense¿. Sin embargo, esta faceta publicitaria del director apenas ha sido estudiada.Del mismo modo, existe una incomprensible ausencia de estudios sobre el trailer, una de las principales herramientas del marketing cinematográfico. Afortunadamente, en los últimos años está suscitando mayor interés gracias a que, con la llegada de las nuevas tecnologías (sobre todo el DVD e Internet), el trailer ha multiplicado considerablemente su capacidad de difusión y, por tanto, su eficacia.Motivados por estas dos carencias que encontramos en el mundo de la investigación, hemos decidido estudiar la marca Hitchcock en los trailers de sus largometrajes en la década de 1955 a 1965, pues son unos años decisivos tanto en la evolución del cine, la publicidad y los trailers, como en la carrera de Hitchcock.En primer lugar hemos realizado una investigación documental en bibliotecas, videotecas, Internet, etc. sobre Hitchcock, los trailers y la década elegida. Además, hemos entrevistado a José Luis Castro de Paz, especialista en la materia. A continuación, siguiendo un método inductivo, hemos analizado los trailers de Hitchcock empezando por sus unidades mínimas, los planos. Después el montaje de imágenes y sonidos, los aspectos narrativos y los exclusivamente publicitarios, así como la presencia de la marca Hitchcock en todos ellos.Como resultado, hemos obtenido una serie de características comunes a los trailersanalizados y hemos podido confirmar la hipótesis que nos planteamos al comienzo, que Hitchcock utilizó los trailers de sus películas para comunicar y consolidar su marca personal. Por otro lado, hemos constatado que, a finales de los cincuenta, irrumpe en estos trailers la imagen de marca que creó para su serie de televisión, la de un Hitchcock cómico y macabro. Una imagen que utilizará, desde ese momento, para mitigar el impacto de sus largometrajes más descarnados, con mayores contenidos violentos y sexuales, sobre la crítica y los espectadores más conservadores.