Oscilaciones del nivel del mar desde el Pleistoceno superior en el sector costero Sagunto-Benicasim (Valencia-Castellón)registro sedimentario, geoquímico e histórico

  1. Mediato Arribas, José Francisco
unter der Leitung von:
  1. Cristino José Dabrio González Doktorvater
  2. Rosa María Mediavilla López Doktorvater/Doktormutter
  3. Juan Ignacio Santisteban Navarro Doktorvater

Universität der Verteidigung: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 02 von Februar von 2016

Gericht:
  1. M. Nieves Meléndez Hevia Präsidentin
  2. María Belén Muñoz García Sekretärin
  3. Teresa Bardaji Azcárate Vocal
  4. Ana María Blázquez Morilla Vocal
  5. Juana Vegas Salamanca Vocal
Fachbereiche:
  1. Geodinámica, Estratigrafía y Paleontología

Art: Dissertation

Zusammenfassung

Esta memoria recoge los resultados de los estudios estratigráficos y geoquímicos de alta resolución realizados en el registro Pleistoceno superior-Holoceno de las llanuras costeras de Castellón de la Plana y Sagunto. La finalidad de esta investigación es (1) reconstruir la arquitectura estratigráfica del relleno sedimentario de dichas llanuras costeras; (2) elaborar mapas paleogeográficos que muestren la evolución sedimentaria del registro contando para ello con la información adicional aportada por los datos históricos y arqueológicos; (3) establecer un modelo de relleno de cuenca, analizar los factores que controlan la sedimentación y (4) proponer una curva de evolución relativa del nivel del mar. El estudio de afloramientos aislados y de los cortes de los ríos principales y de 15 sondeos con recuperación de testigos ha permitido diferenciar dos unidades aloestratigráficas: la Unidad Pleistocena y la Unidad Holocena. La unidad del Pleistoceno superior está compuesta por depósitos de conos de deyección y de abanicos aluviales de baja pendiente. Los segundos incluyen tres secuencias deposicionales separadas por paleosuelos, que se enmarcan dentro de periodos de nivel del mar alto, coincidiendo con los estadios isotópicos marinos MIS 5 y el MIS 3. Durante parte del Pleistoceno y comienzos del Holoceno la actividad tectónica de fallas normales con directrices catalánide e ibérica retocó el techo de los depósitos pleistocenos y condicionó la topografía al inicio de la sedimentación holocena. El límite entre las dos unidades es una discontinuidad estratigráfica que, según se deduce de la cartografía y de las dataciones de 14C y luminiscencia ópticamente estimulada (OSL), es una laguna estratigráfica en las zonas próximas a los cauces fluviales principales y un hiato sedimentario en los interfluvios. El relleno holoceno se distribuye en dos áreas: una entre los relieves mesozoicos y las llanuras costeras, compuesta por depósitos de abanicos aluviales de poca extensión, y otra en las zonas bajas o distales de los abanicos aluviales pleistocenos, formada por los depósitos de playa barrera y llanura fluvial. Los depósitos de playa barrera rellenan las cuencas de Almenara-Nules y Benicasim, y las llanuras fluviales las cuencas de los ríos Mijares y Palancia. El registro sedimentario más completo y preciso se encuentra en las cuencas de Almenara-Nules y Benicasim, donde se han distinguido 6 parasecuencias transgresivas-regresivas (T-R) que se han agrupado en dos cortejos sedimentarios. El inferior, en el que aparecen depósitos litorales, corresponde a un cortejo transgresivo (TST) y el superior, en el que domina la sedimentación lacustre, a un cortejo de nivel del mar alto (HST). Ambos están, limitados por una superficie máxima inundación datada ca. 7.000 a. cal. BP. Las variaciones glacio-eustáticas controlaron la sedimentación de las llanuras costeras de Sagunto y Castellón durante el Pleistoceno superior y las primeras fases del Holoceno. A partir de los 7 ka dejó de actuar el factor glacio-eustático y pasaron a dominar los factores comunes del Mediterráneo occidental, en especial las corrientes marinas superficiales gobernadas fundamentalmente por el clima. La comparación con los resultados obtenidos en otros sistemas sedimentarios litorales y marinos del Mediterráneo occidental permite deducir que estas oscilaciones del nivel del mar se produjeron en ciclos de aproximadamente de 1.500 a 1.800 años, coincidiendo con eventos fríos de Bond.