Identidades masculinasestereotipos de género y participación en la educación física, la actividad física y el deporte

Resumen

Las clases de EF y la práctica de actividades físico-deportivas se conforman como un ambiente idóneo donde se desarrolla la identidad de género, en general, y las identidades masculinas, en particular. Este estudio se centra en las identidades masculinas al corroborar el bajo índice de investigaciones a este respecto a nivel nacional e internacional, utilizando como base de conocimiento los estudios anglosajones. Los objetivos principales que se han buscado con esta investigación aluden a: las relaciones que se establecen entre las diversas tipologías de rol de género y la participación en actividades físico-deportivas; la conceptualización de la identidad masculina en los alumnos pre-adolescentes; las relaciones existentes entre las diversas identidades masculinas y los estereotipos de género vigentes en el ámbito de la EF, la actividad física y el deporte; y la influencia del profesorado de EF en el mantenimiento de ciertos estereotipos de género. La investigación se centra en una visión bio-psico-social de la identidad de género donde además de los rasgos de personalidad, el ambiente también determina el desarrollo de dicho proceso. A partir de la adopción de un modelo de investigación mixto con una doble aproximación, se realizaron cuestionarios a una muestra de 937 varones matriculados en centros públicos de 5º y 6º de Primaria de la comunidad de Madrid. En el estudio cualitativo se realizaron 6 grupos de discusión formados por 48 alumnos finalmente y 11 profesores y profesoras especialistas en EF a los cuales se les entrevistó individualmente. En cuanto a los resultados más significativos se puede decir que la tipología de rol de género andrógina es la que practica de forma regular más actividad físico-deportiva y con mayor frecuencia junto con la masculina. Los motivos por los que se practica actividad física atienden al aspecto físico en términos de desarrollo muscular y de fuerza, principalmente aunque también por la competición que se genera o el interés que suscita en ellos. La identidad masculina va evolucionando a lo largo del tiempo y existen gradaciones que varían en función de la práctica de actividades físicas aceptadas socialmente al sexo masculino y de la destreza motriz mostrada en este tipo de actividades físico-deportivas. A los chicos que no muestran estas capacidades se les someten a burlas, insultos, agresiones físicas y exclusión social. Permanecen vigentes los estereotipos de género tales como que los chicos muestran mayor interés por la práctica de actividades físico-deportivas, que los chicos resuelven los conflictos de forma más violenta y que la preferencia de actividades físico-deportivas hace referencia a actividades competitivas donde se muestre públicamente la destreza deportiva frente a las chicas que prefieren actividades artístico-expresivas, con un bajo componente de contacto y esfuerzo físico. El profesorado considera que ofrece el mismo trato a sus alumnas que a sus alumnos, aún así se sigue demandando una mayor exigencia a los varones durante las clases y se tienen menores expectativas de éxito en el alumnado femenino. La coeducación apenas se tiene en cuenta por el profesorado a hora de seleccionar los contenidos que configuran la programación anual, dejando relegados los contenidos relacionados con las actividades artístico-expresivas.