"Darstellung", diálogo y comunidadhacia una comprensión de la ontología hermenéutica gadameriana como filosofía de la finitud

  1. Mancebo Pérez, Pilar
Dirigida por:
  1. Juan Manuel Navarro Cordón Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 19 de enero de 2016

Tribunal:
  1. Ramón Rodríguez García Presidente
  2. Carmen Segura Peraita Secretaria
  3. Antonio Gómez Ramos Vocal
  4. Luis Enrique de Santiago Guervós Vocal
  5. Diego Sánchez Meca Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La presente investigación busca desplegar el marco que hace posible comprender la hermenéutica gadameriana no como hermenéutica filosófica, sino como filosofía hermenéutica, es decir, no como una doctrina del método, sino como una ontología. Esta ontología, difícil de rastrear en los escritos gadamerianos, es aquí desplegada desde las nociones de Darstellung, diálogo y comunidad, que se muestran en una conexión intrínseca, lógicamente exigida por la noción de Darstellung, que es la noción fundamental de la ontología de la obra de arte, universalizada en el suelo matricial del lenguaje. En este sentido, la primera parte de la investigación busca comprender la noción de Darstellung en tanto que presentación, tanto en el arte como en el lenguaje. En relación con el arte, esta noción busca superar la subjetivación del arte y rehabilitar la noción de verdad, al comprender la unidad inseparable entre arte y mundo. Esta noción será universalizada en el lenguaje, con lo que se superará la noción del lenguaje como signo (Crátilo) y el concepto epistemológico de objetividad, dada la unidad inseparable entre lenguaje y mundo. No hay distinción entre presentación (arte y lenguaje) y presentado. En esta medida, la noción de verdad no puede ser comprendida como adaequatio, sino como alétheia, y eso significa que el lenguaje, que universaliza la estructura de la presentación, es el fundamento de inteligibilidad: la manifestación es un momento del ser mismo, un trascendental del ser. Esta noción de presentación conduce necesariamente a la noción de diálogo en la segunda parte de la investigación, por cuanto que toda presentación es siempre una ¿presentación para...¿. En relación con el arte, esta noción se despliega en conexión con el concepto de juego, con el que Gadamer supera el subjetivismo moderno, al redefinir la esencialidad del espectador en la obra de arte y la temporalidad de la obra de arte como fiesta. Esta estructura se universaliza en el análisis del lenguaje, por cuanto el diálogo es el modo de realización (Vollzugsweise) del lenguaje. La lógica del lenguaje no es por tanto la de la proposición, sino la lógica de la pregunta y la respuesta, cuyo modelo es la dialéctica platónica, que define el lenguaje como una estructura especulativa (Hegel) que implica esencialmente una escucha-pertenencia (Zugehörigkeit). Desde la noción de diálogo se alcanza, pues, la estructura dialéctica de la presentación, universalizada en la estructura dialógica de la comprensión (Verstehen), que, previa a todo comportamiento subjetivo, es un acontecer, actualizado históricamente. Esta pertenencia esencial a la presentación dialógica exige un presupuesto antropológico, el de la comunidad, que es el objeto de estudio de la tercera parte de la investigación. En relación con el arte este presupuesto aparece como recuperación del concepto humanista de sensus comunis y se despliega en los conceptos antropológicos de juego, símbolo y fiesta, que articulan el posicionamiento gadameriano frente a la tesis hegeliana del carácter pasado del arte. Esta noción de comunidad aparece también como presupuesto en la concepción gadameriana del lenguaje, por cuanto que este es siempre Miteinander, que es lo que define la comunidad propiamente humana y la exigencia de todo diálogo. Por ello, la comunidad es pensada en relación con la noción griega de amistad en tanto que la búsqueda común de lo bueno (katà tò kalón) presupuesta en toda deliberación. Desde aquí, se alcanza la noción de experiencia como punto de anclaje de la ontología hermenéutica, que es, por ello, una filosofía de la finitud, una ontología de las nociones trascendentales.