Cultura y desarrollo. América Latinade la década perdida a la globalización

  1. Quezada Soto, Pablo Esteban
Dirigida por:
  1. Carlos María Caravantes García Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 15 de enero de 2016

Tribunal:
  1. Tomás Calvo Buezas Presidente
  2. Paloma González del Miño Secretaria
  3. Carmen Osuna Nevado Vocal
  4. María Dolores González Guardiola Vocal
  5. Felipe Ruiz Alonso Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Este estudio pretende dilucidar si las fórmulas arbitradas por la élites rectoras latinoamericanas para resolver las problemáticas anexas a la coyuntura crítica que la región experimentó en los años ochenta, -la "Década Perdida"-, corresponden en lo esencial a réplicas del patrón o imaginario fundante, matriz de símbolos, es decir al hecho de la colonización original. Es una investigación académica enfocada a la generación de conocimientos a partir de la producción teórico-ceítica y del análisis institucional en correlato con el desenvolvimiento histórico, emprendimiento que habilita comparaciones culturales cruzadas proclives a facilitar ponderaciones sobre el desarrollo, tema central. Como planteamiento o estrategia metodológica se asume la postura caracterizada por Clifford Geertz, del autor como co-investigador, siendo contraparte, en tanto actoresagentes: académicos, intelectuales, políticos, expertos, cientistas sociales, periodistas. Se hace acopio de información estadística proveniente de macro-encuestas regionales, públicas y privadas, aparte de la facilitada por los organismos internacionales, a través de lo gráfico-relacional. Tras dar cuenta de los efectos de la nueva constelación tecnológica, concomitante con la trasnacionalización de la economía y la globalización imperante, se analiza, en conformidad con el estudio histórico-social de las subjetividades subalternas, el surgimiento de sujetos o agentes sociales transformadores, o en camino de serlo, que emergen de la economía informal, de la proliferación del culto evangélico, nuevos movimientos sociales, la reivindicación indígena, los outsiders políticos. Después de constatar que las "reformas estructurales" no desarmaron el raciocinio que está en el origen de los círculos viciosos que las justificaron, se concluy