Quimerismo leucocitario en el trasplante hepático. Hacia la utopía de la inmunotolerancia y la no inmunosupresión

  1. GARCIA-SESMA PEREZ-FUENTES, ALVARO
Dirigida por:
  1. Carmelo Loinaz Segurola Director
  2. Enrique Moreno González Director
  3. R. Ayala Diaz Directora

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 12 de enero de 2016

Tribunal:
  1. Jaime Arias Pérez Presidente
  2. Luis Díez Valladares Secretario
  3. Javier Nuño Vázquez-Garza Vocal
  4. Miguel Ángel García Ureña Vocal
  5. José Antonio Rodríguez Montes Vocal
Departamento:
  1. Cirugía

Tipo: Tesis

Resumen

Se ha conseguido una supervivencia prolongada de los injertos y de los pacientes trasplantados hepáticos gracias al desarrollo de fármacos inmunosupresores cada vez más potentes y eficaces para evitar el rechazo. La base de la inmunosupresión siguen siendo los fármacos anticalcineurínicos, pero su toxicidad puede ser una importante causa de mortalidad. El hígado es un órgano con una especial tolerancia, que permite que algunos pacientes mantengan injertos funcionantes sin tomar ninguna inmunosupresión (tolerancia clínica operacional, TCO) y otros mantengan una inmunosupresión mínima (tolerancia de mínima inmunosupresión, TMI). Un porcentaje alto de pacientes trasplantados presentan una situación de quimerismo leucocitario del donante que podría jugar un papel en la tolerancia al injerto hepático. Hemos realizado un estudio retrospectivo, longitudinal y descriptivo sobre una población de pacientes trasplantados, analizando la inmunosupresión recibida y los factores relacionados con la incidencia de rechazo y de complicaciones relacionadas con la inmunosupresión. Por otro lado hemos analizado en un grupo más reducido de pacientes la situación de quimerismo leucocitario del donante y su relación con la evolución de injertos y pacientes. Los pacientes han presentado a medio y largo plazo una alta incidencia acumulada de patologías asociadas a la toxicidad de la inmunosupresión. A medida que aumenta el tiempo de seguimiento postrasplante es posible disminuir la inmunosupresión, de forma que aproximadamente la mitad de los pacientes adultos en seguimiento en nuestra consulta se encuentran en situación de TMI, sin un aumento importante de los fenómenos de rechazo, pese a la ausencia de marcadores fiables que nos permitan predecir su riesgo. Actualmente el número de pacientes trasplantados hepáticos en situación de TCO es mínimo. Hemos encontrado distintos factores que nos han llevado a una mayor disminución de la inmunosupresión y otros que han motivado una inmunosupresión en niveles más altos. Una mayoría de pacientes presentan un quimerismo leucocitario del donante detectable en sangre periférica. Sin embargo no hemos podido demostrar que dicho quimerismo guarde una asociación importante con el rechazo o la toxicidad de la inmunosupresión, aunque sí se asocia con una mayor supervivencia de los pacientes.