Las pruebas rápidas del VIH en Españadescripción de programas, evaluación de impacto y análisis de su potencial como estrategia para promover el diagnóstico precoz

  1. Fernández Balbuena, Sonia
Dirigida por:
  1. María José Belza Egozcue Director/a
  2. Enrique Regidor Poyatos Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 19 de enero de 2016

Tribunal:
  1. David Martínez Hernández Presidente/a
  2. María Rosa Rita Villanueva Orbáiz Secretario/a
  3. Marta Ortiz Rivera Vocal
  4. Asunción Díaz Franco Vocal
  5. Ana Almaraz Gómez Vocal
Departamento:
  1. Salud Pública y Materno-Infantil

Tipo: Tesis

Resumen

Desde la aprobación del uso de las pruebas rápidas de VIH en España en 2006 y a pesar del creciente número de programas que las utiliza, no se ha hecho ninguna evaluación a nivel nacional que permita conocer el papel de esta estrategia en nuestro contexto sociosanitario. El propósito del presente trabajo es, por una parte, evaluar el impacto que han tenido los programas de pruebas rápidas de VIH que han funcionado en España entre los años 2007-2012 sobre el conjunto de nuevos diagnósticos de VIH y, por otro lado, analizar de forma individualizada algunos programas muy relevantes bien por su diseño bien por la magnitud de su actividad. Para ello, se recopilaron datos agregados de todos los principales programas, estimando cuál sería la proporción de nuevos diagnósticos de los reportados al Sistema de Información de Nuevos Diagnósticos de VIH, SINIVIH, atribuibles a estos programas. También se analizó la información de 7552 personas que se hicieron la prueba en un programa móvil de alta visibilidad; de 3251 que se lo hicieron en un programa orientado a poblaciones especialmente vulnerables y renuentes a acudir al Sistema Nacional de Salud y de 24151 personas que acudieron a programas desarrollados en farmacias de tres comunidades autónomas. En total, entre los años 2007-2012, en España se hicieron 95575 pruebas rápidas de VIH fuera de los entornos sanitarios de las que 2061 resultaron reactivas representando el 7,7 por ciento del total de nuevos diagnósticos en ese periodo y el 13,3 por ciento entre los hombres que han tenido relaciones sexuales con otros hombres, HSH. Así, estos programas demostraron capacidad para constituirse como estrategia relevante o incluso predominante en algunas subpoblaciones, como los HSH. La gran visibilidad que define a algunos de estos programas ha resultado un factor clave a la hora de atraer a personas con riesgo alto de infección que nunca antes se había realizado ninguna prueba. También se demuestra que existen poblaciones muy específicas y vulnerables que no están siendo captadas por los servicios sanitarios normalizados, en los que estos programas demuestran una buena efectividad; en concreto en mujeres que ejercen la prostitución, subsaharianos y transexuales. Los programas en farmacias han demostrado ser factibles, capaces de aportar uno de cada 10 nuevos diagnósticos y de atraer a una proporción de población heterosexual mayor que ningún otro programa de pruebas rápidas.