Validación de la Escala de Montreal como test de cribado de deterioro cognitivo en la esclerosis múltiple

Zusammenfassung

Introducción: La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad autoinmune desmielinizante, crónica y multifocal del sistema nervioso central, que afecta principalmente a adultos jóvenes y que provoca una importante discapacidad física y cognitiva. Se estima que entre un 45 y un 65 por ciento de los pacientes con EM padecen disfunción cognitiva, con un perfil subcortical y con grandes repercusiones en el desempeño laboral y en las actividades de la vida diaria, por lo que resulta preciso disponer de tests sencillos y rápidos que permitan detectar en unos minutos aquellos casos de EM que puedan presentar deterioro cognitivo. El objetivo de evaluar la validez diagnóstica y la fiabilidad del MoCA test como herramienta de cribado de deterioro cognitivo en pacientes con diagnóstico de EM frente a la Batería Neuropsicológica Breve (BNB). Material y métodos: Se reclutaron un total de 52 pacientes atendidos en la consulta monográfica de enfermedades desmielinizantes del Hospital Universitario Infanta Leonor de Madrid. Se utilizaron la escala BNB -como prueba de referencia- y el MoCA test para el diagnóstico de deterioro cognitivo. El estudio de la fiabilidad incluyó la valoración de la consistencia interna, la fiabilidad interobservador y la fiabilidad test-retest y en el estudio de validez del MoCA Test se analizaron la validez de constructo, tanto interna como externa, y la validez de criterio. Asimismo, se llevó a cabo un análisis para identificar los factores sociodemográficos y clínicos que podían estar asociados con la presencia de deterioro cognitivo según la puntuación en la escala BNB. Resultados: Según la escala BNB la prevalencia de deterioro cognitivo fue del 21,2 por ciento, y según el MoCA Test, del 25 por ciento. El alfa de Cronbach total del MoCA Test fue de 0,822. El CCI fue de 0,80 (p menor 0,001) para la fiabilidad interobservador y de 0,96 (p menor 0,001) para la fiabilidad test-retest, y el índice Kappa fue de 1 en ambos casos. El área bajo la curva fue de 0,96 (p menor 0,001). Los puntos de corte seleccionados que maximizaron los valores de sensibilidad y especificidad para el MoCA Test fueron el 25 y el 26 con una sensibilidad del 91 por ciento, especificidad del 93 por ciento y acuerdo global del 92 por ciento. El coeficiente de probabilidad positivo fue de 12,42 y el negativo de 0,09. Conclusión: El MoCA Test ha mostrado ser una herramienta válida y fiable como método de cribado del deterioro cognitivo asociado a la EM.