Sobrevivir sin género en la zona grisla deshumanización en los campos de concentración nazis en perspectiva feminista

  1. MARTOS ARDID, PAULA
Dirigida por:
  1. Manuel Reyes-Mate Rupérez Director/a
  2. Elena Hernández Sandoica Directora

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 16 de noviembre de 2015

Tribunal:
  1. Gloria Nielfa Cristóbal Presidenta
  2. Francisco Javier Fernández Vallina Secretario
  3. Beatriz Pichel Pérez Vocal
  4. Cristina Sánchez Muñoz Vocal
  5. Concha Roldán Panadero Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

El objetivo de esta investigación es explorar la relación entre las categorías de ¿ser humano¿ y ¿ser sexuado¿ mediante el análisis histórico de un acontecimiento extremo, la experiencia totalitaria que tiene lugar en el interior de los campos de concentración nazis, en el que ambas categorías son puestas a prueba al destruirse de manera violenta las condiciones que en las sociedades modernas se consideran generalmente como requisitos inalienables para mantener y preservar dichas categorías. El producto por excelencia del campo de concentración, el llamado musulmán en la jerga del campo, es un ser al que resulta difícil nombrar como humano y en el que el sexo queda completamente disuelto: es un ser abyecto, expulsado de la norma humana y de la norma sexual. Lo que se pretende pues a través de este análisis, además, es ayudar a comprender de qué manera lo humano se construye siempre en un sentido sexual y, del mismo modo, se destruye a través de una desestabilización del género. Para dar forma a esta propuesta se ha optado por una aproximación histórica a los documentos producidos por los libertadores del campo de concentración de Bergen-Belsen en tanto que representantes del llamado grupo de los ¿espectadores del holocausto¿. A través del estudio de estos documentos, conservados en el Imperial War Museum de Londres, se pretende entender cómo se produjo en el interior de los campos la deshumanización tantas veces testimoniada por las víctimas del nazismo, de qué manera esta deshumanización adquirió la forma de una de-generación o desexualización, y en qué medida la mirada ajena de los espectadores se convirtió si no en cómplice, al menos sí en un elemento sancionador de dicho proceso de deshumanización. La comprensión del papel de los espectadores se considera singularmente importante porque ellos son los que conectan al resto de la sociedad con este acontecimiento.