Estudio comparativo de la sedación consciente asociada a la anestesia local para el control de la ansiedad y el dolor en los aspirados/biopsias de médula óseafrente a la práctica habitual con anestesia local

Resumen

OBJETIVO: averiguar si la adición de una pequeña cantidad de cloruro mórfico (0,2 mg) al anestésico local durante la anestesia espinal proporciona una analgesia óptima en el posoperatorio de cesáreas programadas eludiendo el consumo de morfina iv. y facilitando la movilización temprana de las pacientes, el inicio de la lactancia materna, la recuperación del tránsito intestinal y el alta hospitalaria precoz, contribuyendo a implementar la satisfacción de las mujeres con la analgesia recibida. MATERIAL Y MÉTODOS: se realizó un estudio prospectivo, analítico de cohortes en el que se incluyeron, de forma consecutiva, las mujeres programadas para cesáre. Se incluyeron 34 pacientes en la cohorte no expuesta y 35 en la expuesta. Se evaluó la estabilidad hemodinámica materna, la calidad de la analgesia, la aparición de náuseas y vómitos y el bienestar fetal intraoperatorios. En el posoperatorio se realizaron tres visitas: Unidad de Reanimación, a las 6 horas y a las 24 horas tras la finalización de la cesárea. Se anotó el consumo de morfina iv. y de otros analgésicos, la valoración del dolor, la aparición de eventos adversos (náuseas, vómitos, prurito, sedación y depresión respiratoria), el inicio de la sedestación y bipedestación, la recuperación del tránsito intestinal y la satisfacción de la pacientes. Durante el ingreso de las mujeres en la Reanimación se anotó la aparición de escalofríos. Finalmente se obtuvo la duración del ingreso hospitalario mediante una revisión de la historia clínica. RESULTADOS: encontramos una incidencia de hipotensión arterial materna inferior en la cohorte expuesta, así como un menor consumo de medicación iv. (propofol, fentanilo y midazolam) adicional para control del dolor y una menor incidencia de náuseas y vómitos. Los hijos de las mujeres que recibieron la morfina espinal presentaron unos valores de pH (7,32) superiores. El consumo de analgésicos fue inferior en la cohorte expuesta (p < 0,01) al igual que la valoración del dolor (p < 0,01). A las 6 horas, 97% de mujeres que recibieron la morfina subaracnoidea eran capaces de sentarse frente al 6% de mujeres del otro grupo. 97% de mujeres de la cohorte expuesta eran capaces de caminar a las 24 horas frente 8,8% de mujeres del otro grupo (p < 0,01). No encontramos diferencias significativas al valorar la aparición de eventos adversos. Trascurridas 6 horas tras la finalización del parto, 100% de las mujeres de la cohorte expuesta habían recuperado el tránsito intestinal frente al 64,7% de mujeres del otro grupo. Aunque las diferencias registradas no fueron estadísticamente significativas, un mayor número de mujeres que recibieron la morfina espinal (80%) no presentó escalofríos en comparación con las mujeres del otro grupo (58,8%). La satisfacción con la analgesia recibida fue superior en el grupo tratado con morfina espinal. En la cohorte expuesta se redujo la estancia hospitalaria en un día. CONCLUSIÓN: la adición de morfina al anestésico local durante la anestesia subaracnoidea para la cesárea no altera la estabilidad hemodinámica de las pacientes ni el bienestar fetal, proporcionando una analgesia de calidad y reduciendo la aparición de náuseas y vómitos. En el posoperatorio, reduce el consumo de analgésicos, decrece la frecuencia en la aparición de escalofríos, favoreciendo la movilidad precoz de las mujeres que las permitirá atender al recién nacido e iniciar la lactancia materna y la recuperación del tránsito intestinal, sin incremento en la aparición de eventos adversos, lo que aumenta la satisfacción con la analgesia recibida. La aplicación de la morfina espinal durante el acto anestésico para cesáreas programadas reduce en un día la estancia hospitalaria.