La obra de cartógrafo Cano y Olmedilla y su mapa de la América Meridional de 1775

Resumen

Con el presente trabajo hemos elaborado un estudio del mejor de los mapas sobre América del Sur realizado por España en los momentos en que aquellos territorios formaban parte de nuestra Nación. La responsabilidad de realizar la ingente obra recayó, no por casualidad, sobre Juan de la Cruz Cano y Olmedilla, eminente cartógrafo que se empeñó en realizar el mapa de la mejor manera posible, respondiendo así a la preparación por él recibida según el plan elaborado por parte de Jorge Juan y Antonio de Ulloa, siguiendo órdenes del marqués de Ensenada. La realización de un mapa tan completo, chocó con la interpretación que de él realizaron las distintas corrientes políticas de la Corte. En esta tesis demostramos que el mapa, al contrario de lo que se publicitó en el último cuarto del siglo XVIII, era excelente para su época, y que fueron problemas políticos relacionados con los distintos grupos de poder existentes en Madrid, los que se proyectaron sobre el mapa. Su posterior rehabilitación se produjo por parte de elementos extranjeros, que copiaron el mapa para ayudar a independizar los territorios que en él se representaban, y por la administración de Godoy, que demandaba una obra con las características del Mapa de América Meridional de 1775, para intentar solucionar los problemas que surgían en el sur americano. Para la realización del presente trabajo nos adentramos en el estudio de la vida y obra del autor del mapa, algo que no se había realizado hasta este momento, y que consideramos importante, pues ambas, vida y obra de Cruz Cano, giraron en torno al Mapa de América Meridional. Para el estudio geográfico de la obra, se han utilizado dos sistemas de información geográficos, con los que se analiza el mapa y la toponimia. Uno de los problemas principales relacionados con la historia del mapa, y que se analiza en este trabajo es el enfrentamiento político, entre los dos personajes más importantes de la administración española del momento, el marqués de Grimaldi y el conde de Aranda, pugna política aprovechada por otras potencias extranjeras. Los objetivos principales del trabajo son: en primer lugar, demostrar que, contrariamente a lo que se había afirmado en España durante años, el mapa realizado por Cruz Cano y concluido en 1775, fue la mejor obra cartográfica realizada sobre América del Sur en su tiempo; en segundo lugar, analizar las causas por las que se denigró el mapa por parte de la administración española, y los problemas internacionales en los que la obra cartográfica se vio envuelta. La metodología de análisis seguida consistió en conseguir la mayor información posible sobre el autor y su obra principal. Así, se observó que toda su vida y la de su familia, junto con el resto de su obra calcográfica, giraron sobre el hecho de construir el gran mapa de América del Sur. Se analizó el mapa para observar su calidad geográfica; para ello se utilizaron dos sistemas de información geográfica, comparando el mapa con la realidad actual y analizando, entre otras cosas, su toponimia. Igualmente comparamos el mapa de Cruz Cano, con otros de distintos cartógrafos contemporáneos suyos. Las conclusiones son que el mapa era el mejor que se pudo hacer en aquellos momentos, que fueron los problemas políticos españoles los que generaron las críticas negativas hacia el mapa, acrecentadas al ser copiado el mapa por los enemigos de España, que lo utilizaron contra nosotros. El mapa sería rehabilitado y utilizado finalmente por la administración española, pero la vida de su autor ya fallecido en aquellos momentos, había sufrido un fuerte impacto negativo en el aspecto profesional, económico y familiar, desde que construía el mapa hasta el fin de sus días. El Mapa de América Meridional construido por Juan de la Cruz Cano, aún a pesar de sus defectos, fue el más completo que sobre América del Sur se realizó hasta la utilización de la fotografía aérea en la cartografía.