Cine cubanouna representación entre el peregrinaje político y el espectáculo de la violencia

Resumen

Sabemos que el imaginario está útil y netamente sujeto a la conciencia comunitaria, con la salvaguarda de la historia y los mitos colectivos que esto conlleva. Por ello, desde una perspect iva cultural, nuestro estudio examina una de las formaciones discursivas fundacionales y mediadoras de las relaciones de poder nacidas de la Cuba en Revolución. Formación que hemos llamado ¿lo cubano revolucionario¿. Y debido a su función como cabeza de ésta y a su valor seminal en la reproducción de la misma, nos hemos ocupado específicamente del cine de peregrinaje político: como hemos definido la producción cinematográfica elaborada por representantes internacionales de la izquierda durante l a Guerra Fría Cultural en el decenio triunfal de la Revolución cubana (1960-1970). ¿Cuáles han sido los procesos culturales, intelectuales y estéticos que procuraron en un primer momento la elaboración de una ¿tradición primermundista¿ de ¿lo cubano revolucionario¿? ¿Cómo y por qué se ha (re)producido respecto a ello el compromiso entre la acción cultural, la tendencia política, el aparato estatal revolucionario y la realidad específica? ¿De qué manera han confluido en la curiosidad, la identifi cación y el conocimiento, los textos audiovisuales y de otras áreas gestionados por el programa de peregrinaje político hasta conseguir convertirse en pilares de animación de tal imaginario? Éstas son las preguntas primarias que, acentuando la sujeci ón de sus posibles respuestas al acto violento como factor de gestación, han guiado el examen que planteamos. El cual arranca con un fundamento esencial: la negociación de tal formación discursiva entre el otro y el yo políticos; a saber: entre la Re volución buscando reconocimiento para la (re)invención nacional y los espacios legitimadores europeos ¿debido al origen de los cineastas¿ apropiándose del precepto militante de la misma. Un examen que entiende como factor de gestación el cúmulo de pr ácticas violentas tenidas como útiles y glorificantes para la comunidad; el cual se establece miméticamente en tanto que signo de lo sublime y principio rector de la trascendencia del proyecto colectivo, hasta llegar a evaluarse por encima de la étic