La amenaza terrorista a los periodistas españoles

Abstract

Los medios de comunicación españoles en general y vascos en particular han sufrido durante dos décadas el acoso y la amenaza de grupos terroristas y han vivido una dramática experiencia, desconocida en los países de nuestro entorno. En plena transición democrática ETA decidió atentar contra los periodistas por el contenido de sus infonnaciones. Desde 1978 hasta 2003 la organización tenrrorista asesinó a tres profesionales, vinculados con los medios de comunicación, y ha atentado contra una cincuentena de ellos, dejando importantes secuelas físicas y psiquicas a los que fueron víctimas de sus acciones. ETA atenta contra los periodistas porque considera que la linea editorial de los medios en los que trabajan son un obstáculo para los logros independentistas que propugnan, y se niegan a admitir el rechazo, desde la prensa, a la violencia y el telTorismo como argumento político. El miedo, la indiferencia o la complicidad encubiel1a hizo que durante la época en la que la prensa estuvo hostigada por ETA se guardara silencio, tanto desde los propios medios de comunicación, como desde la sociedad. No fue hasta el año 2000 cuando colectivos profesionales e instituciones internacionales levantaron su voz, denunciando, no sólo a los firmantes de las amenazas, los actos violentos y los asesinatos, sino también a quienes, desde planteamientos políticos y sociales guardaban cómplice silencio o aprobación. Pero los asesinatos, las mutilaciones y las pennanentes extorsiones y amenazas no consiguieron silenciar a los periodistas que siguieron utilizando la libertad de expresión como única arma, no sólo para defender sus derechos, sino los de toda la sociedad, porque una sociedad desinformada no es una sociedad libre. Desde los atentados del (1 de septiembre hay un debate intemacional sobre cómo informar sobre los actos terroristas. Unos defienden el "apagón"' informativo para no publicitar los actos terroristas. Otros pi