Estudio cuantitativo y comparativo entre las distintas zonas dadoras corticoesponjosas intraorales

  1. Reininger Dueñas, David
Dirigida por:
  1. Juan López-Quiles Martínez Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 19 de diciembre de 2018

Tribunal:
  1. Rafael Baca Pérez Bryan Presidente
  2. Isabel Fernández Tresguerres Secretaria
  3. Manuel Fernández Domínguez Vocal
  4. Pedro Casillas Ascanio Vocal
  5. Carlos Cobo Vázquez Vocal
Departamento:
  1. Especialidades Clínicas Odontológicas

Tipo: Tesis

Teseo: 149274 DIALNET

Resumen

Introducción: A nivel odontológico los injertos autólogos mayormente utilizados para defectos óseos pequeños y medianos son los injertos autólogos intraorales, siendo los de rama-cuerpo y sínfisis mandibular los más empleados. A pesar de sus notables ventajas, ambos exhiben una gran cantidad de complicaciones postoperatorias. Debido a esto es que diversos autores han publicados nuevas zonas dadoras intraorales como alternativas a las utilizadas comúnmente, que potencialmente puedan producir una menor cantidad de complicaciones. Objetivo: Evaluar y comparar el grosor de cortical, grosor de medular, área de superficie y volumen de las diferentes zonas dadoras intraorales alternativas. Material y método: Se realizó un estudio observacional descriptivo, en donde fueron seleccionados al azar escáneres (Cone Beam) del Servicio de Radiología de la Universidad Complutense de Madrid. En los cone beam se analizaron los grosores tanto de cortical como de medular, área de superficie y volumen de cada una de las zonas dadoras intraorales. Como zonas dadoras fueron analizados la sínfisis mandibular, procesos coronoides, fosita mirtiforme, zona palatina, proceso cigomático-alveolar, cuerpo cigomático, zona palatina anterior y tuberosidad. Resultados: Un total de 59 pacientes fueron incluidos en el estudio. El mayor grosor de cortical se observó en la fosa incisiva y coronoides. Ambas presentan diferencias estadísticas significativas al ser comparadas con la zona mentoniana. El mayor grosor de tejido medular lo presentó el paladar seguido por la zona la tuberosidad y cuerpo cigomático. En este caso también existe diferencia estadísticamente significativa al comparar estos sitios con la zona mentoniana. La zona mentoniana presentó la mayor área de superficie con diferencias significativa por sobre el resto. El mayor volumen también lo registró la zona mentoniana, presentando diferencia significativa con todo el resto de las zonas estudiadas. Discusión: En la literatura son escasas las investigaciones que evalúan la disponibilidad ósea, siendo la gran mayoría estudios cadavéricos y algunos pocos radiográficos y clínicos, estudios que en general se dedican a analizar una zona específica. Al comparar los resultados obtenidos con los descritos en general, los resultados de las medidas no coinciden. Especificamente en los estudios cadavéricos estos no suelen ser similares ya que la toma del injerto es bastante más empirico, si bien es posible delimitar el injerto al momento de realizar la extracción no es posible controlar la profundidad ideal a la cual llegar. Además existe una pérdida de tejido óseo producto de la osteotomía, y no es posible medir el tejido medular completamente. Cuando comparamos los resultados con estudios radiológicos, si bien hay un mayor grado de coincidencia con los resultados descritos, esto no ocurre en todos los casos ya que la delimitación del injerto es distinta, o porque el injerto fue delimitado en cortes muy gruesos, lo cual no permite delimitar específicamente la zona de injerto a extraer, ocurriendo sesgo en la medición. Conclusiones: Si bien la zona mentoniana es desde un punto de vista cuantitativo el sitio intraoral ideal para extraer injerto, se deben considerar los sitios dadores alternativos. Son zonas que en ocasiones pueden estar presentes en el mismo campo quirúrgico de la cirugía. Algunos presentan disponibilidad ósea, en relación al grosor de cortical y medular, mayor que lo que se puede obtener de la zona mentoniana. Presentan cantidad de injerto suficiente para poder realizar técnicas regenerativas de tamaño pequeño, pero que para aumentar su rendimiento se podría combinar con algún sustituto óseo, obteniendo finalmente un volumen mucho mayor, similar a un injerto de la zona mentoniana evitando sus complicaciones.