Anticuerpos antifosfolipídicos de clase iga como factor de riesgo para morbi-mortalidad cardiovascular en el trasplante de órganos sólidos
- Serrano Blanco, Manuel
- Antonio Serrano Hernández Director/a
- José María Morales Cerdán Director
Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid
Fecha de defensa: 12 de diciembre de 2018
- Jesús Hernández Gallego Presidente
- Silvia Sánchez-Ramón Secretaria
- Tomás Chivato Pérez Vocal
- Mario Mellado Garcia Vocal
- Ricard Cervera Segura Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Los resultados del trasplante renal han mejorado recientemente gracias a los avances en inmunosupresión, control de infecciones, técnicas quirúrgicas e histocompatibilidad. Sin embargo, las pérdidas del injerto en los primeros meses postrasplante (5-8%) mayoritariamente por causa trombótica, no variaron. El síndrome antifosfolípidico (APS) es un trastorno autoinmune caracterizado por trombosis y/o morbilidad gestacional en pacientes con anticuerpos antifosfolipídícos (aPL). Los criterios de clasificación del APS (Sidney, 2004) establecen la presencia simultánea de un criterio clínico (trombosis y/o morbimortalidad gestacional) y un criterio de laboratorio (anticoagulante lúpico o anticuerpos anticardiolipina (aCL) o anti B2-Glicoproteína1 (aB2GP1 de clase IgG o IgM). El espectro del APS también incluye otras manifestaciones y anticuerpos no recogidos en los criterios de clasificación. Los anticuerpos extra-criterio, como los aPL de clase IgA, permitirían identificar pacientes con criterios clínicos de APS que son seronegativos. Desde 2010 se recomienda la evaluación de IgA aB2GP1 en pacientes con clínica APS y negativos para los aPL de consenso. En trabajos previos, nuestro grupo describió una elevada prevalencia de IgA aB2GP1 en pacientes con enfermedad renal crónica (ERC) en tratamiento con hemodiálisis y su asociación con incidencia de eventos trombóticos y mortalidad. En otro estudio se demostró que la presencia de IgA aB2GP1 pretrasplante es el principal factor de riesgo independiente para pérdida precoz del injerto renal. La asociación con trombosis fue significativa por el pequeño tamaño del grupo. Por ello se estudió una cohorte histórica ¿Magnum 12+12¿ de 1375 pacientes trasplantados de forma consecutiva durante 12 años. Se confirmó la prevalencia de IgA aB2GP1 (cercana al 30%), y su asociación como principal factor de riesgo independiente para pérdida precoz del injerto por trombosis. Nuestro grupo describió la existencia de inmunocomplejos circulantes formados por IgA unida a B2GP1 (B2A-CIC). Además de su asociación con eventos trombóticos agudos y trombocitopenia, sin relación con la vía clásica del complemento. Para evaluar si la presencia de B2A-CIC en pacientes con trombosis aguda son causa o consecuencia del evento se estudió en la cohorte histórica Magnum 12+12. Se observó que los positivos para B2A-CIC desarrollan más eventos APS en los primeros meses postrasplante, fundamentalmente pérdida del injerto por trombosis. Los negativos para B2A-CIC, tienen el mismo riesgo de trombosis que los negativos para IgA aB2GP1. Tras descartar otros factores genéticos o ambientales como origen de la presencia de IgA aB2GP1 en pacientes con ERC factores, hipotetizamos que la disfunción crónica de un órgano productor de B2GP1, por estrés celular podría elaborar una forma de B2GP1 con plegamiento defectuoso que expusiese epítopos ocultos de forma fisiológica. De modo que la disfunción de otros órganos productores de B2GP1, como corazón e hígado implicaría que estos pacientes también tendrían elevada prevalencia de IgA aB2GP1. Se realizó un estudio sobre una cohorte de 151 pacientes que recibieron trasplante cardiaco de forma consecutiva durante 8 años con un seguimiento a 2 años. Se observó una alta prevalencia de IgA aB2GP1 con cifras similares a la observada en pacientes con ERC. El análisis multivariable confirmó que a IgA aB2GP1 como factor de riesgo independiente para mortalidad temprana y eventos trombóticos después del trasplante. Finalmente, se realizó un estudio multicéntrico prospectivo con pacientes trasplantados renales de 5 hospitales del grupo ¿Forum Renal¿ donde se confirma la elevada prevalencia de IgA aB2GP1 en la población con ERC y su asociación con trombosis del injerto renal. El conjunto de resultados, nos sugiere la posibilidad de estar ante una nueva forma de APS primario relacionada con la insuficiencia funcional de los órganos productores de B2GP1 y mediada por anticuerpos IgA aB2GP1.