La comunicacion digital en los nuevos movimientos sociales (2008-2015)

  1. Enríquez Román, Javier Antonio
Dirigida por:
  1. José Carlos Rueda Laffond Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 25 de mayo de 2018

Tribunal:
  1. Ángel L. Rubio Moraga Presidente
  2. Andrea Donofrio Secretaria
  3. Jorge Hernando Cuñado Vocal
  4. Òscar O. Santos Sopena Vocal
  5. Sara Núñez de Prado Clavell Vocal
Departamento:
  1. Relaciones Internacionales e Historia Global

Tipo: Tesis

Resumen

El estudio de los movimientos sociales presenta un punto de inflexión a partir de dos acontecimientos capitales en la Historia del siglo XX. Primero, la caída del Muro de Berlín, en 1989, y la posterior desaparición de los regímenes comunistas en la Unión Soviética y sus Estados satélites en Europa del Este, con el consiguiente desarrollo del sistema capitalista por todo el planeta, encontrando en el neoliberalismo su última fase de desarrollo. Y, segundo, la irrupción de Internet, generalizada social e institucionalmente a partir de los años noventa, lo que proporciona a los activistas una herramienta fantástica. La Red, unida al espectacular desarrollo de las nuevas tecnologías de la información y comunicación (TIC) como los teléfonos móviles o las pequeñas cámaras de video, impulsa una profunda revolución en los movimientos sociales, capaces de emplear Internet para difundir todo tipo de información sin necesidad de los medios de comunicación tradicionales; promover y fomentar la creación de redes de solidaridad transnacionales; y coordinar actividades entre activistas y simpatizantes, de carácter local. Todas las experiencias de movilización estudiadas en esta investigación (en Islandia, Túnez, Grecia, España, Hong Kong, Brasil o Estados Unidos) se caracterizan por denunciar a una democracia representativa donde un sector de los representados ya no se identifican con los representantes; junto a una economía capitalista incapaz de garantizar empleos seguros o estables, asegurar el derecho a una vivienda digna o que haya bienes públicos y comunes como el agua, la salud o la educación que estén fuera del mercado.