Cierre escéptico y apertura crítica de la pneumatología kantianadel problema alma-cuerpo al postulado de la inmortalidad en la filosofía de Immanuel Kant

Resumen

El problema alma-cuerpo y su conexión con la pregunta filosófica por la posibilidad el a inmortalidad humana constituye uno de los hilos conductores en la historia de las ideas. A pesar dela interpretación en clave inmanentista que ha presidido la recuperación de los estudios kantianos en el último tercio del siglo XIX y en las últimas décadas del siglo XX, se puede afirmar que esa cuestión posee enorme relevancia en el criticismo. Su análisis sistemático y la dilucidación de las condiciones hermenéuticas que permiten su interpretación adecuada viene a cubrir una laguna en los estudios kantianos, tanto en legua española como alemana. En las aetas kantiana, las principales corrientes teóricas que se puede distinguir al respecto son el materialismo, el dogmatismo teorético (espiritualismo) y el dogmatismo fideísta, además de distintos enfoque que confluyen en lanciente antropología. Se puede distinguir tres fases en la evolución del pensamiento del autor. En la primera (1747-1760), Kant se halla muy cercano a Leibniz y Wolff. En el segundo período (1760-1770), y bajo influencia empirista y rousseunina, tiene lugar el que hemos denominado "cierre escéptico" de la pneumatología dogmático-teórica: la declaración de inaccesibilidad teorética de las cuestiones especulativas implicadas en el problema alma-cuerpo. En la tercera fase (1770-1803) se produce la "apertura crítica" (pneumatología dogmático-práctica), en paralelo a la incoación del viraje copernicano y al desarrollo del criticismo. Dicha apertura consiste en el diseño de un marco de inteligibilidad y relevancia sistemática de la dimensión espiritual, posibilitando gracias al concepto de "exigencia" (Bedürfnib) de la razón pura práctica y al postulado de la inmortalidad. La interpretación adecuada del postulado ha de respetar tanto el carácter objetivo-trascendente de su objeto como el alcance subjetivo-inmanente del acto racional que lo propone.