Los astures y el poblamiento castreño en Asturias

  1. Fanjul Peraza, Alfonso
Dirigida por:
  1. Alfredo Mederos Martín Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 19 de enero de 2015

Tribunal:
  1. Martín Almagro Gorbea Presidente
  2. Luis Berrocal Rangel Secretario/a
  3. Jesús R. Álvarez Sanchís Vocal
  4. Alberto José Lorrio Alvarado Vocal
  5. Luis Ramón Menéndez Bueyes Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Esta tesis doctoral revisa la totalidad de yacimientos fortificados y cuevas de Asturias con la finalidad de establecer, por un lado, un mapa fiable de espacios de la Edad del Hierro, mientras que por otra parte, se pretende la obtención de una serie de conclusiones sociales, históricas y culturales del paisaje analizado. Durante décadas el concepto del poblamiento Astur en Asturias se ha basado en premisas académicas tradicionales inasumibles en el resto de regiones de la Europa Atlántica. Con un supuesto mapa de medio millar de yacimientos fortificados y un centenar de cuevas con posibles restos protohistóricos, era necesaria una revisión individual de dicho mapa como primer paso para el análisis de un poblamiento real. A través de las revisiones de todos los yacimientos, cuyos datos se completan con prospecciones subterráneas, recogida de tradición oral, estudios paleo-económicos y edafológicos, así como de varias excavaciones arqueológicas realizadas por el autor, con sus análisis pertinentes, establecemos un primer mapa de yacimientos reales muy diferente al de la base inicial del estudio. A través de la revisión del paisaje y los datos arqueológicos obtenidos podemos establecer la existencia de un poblamiento jerarquizado donde los castros no son aldeas, ni las únicas estructuras de poblamiento en la Edad del Hierro asturiana, sino que se trata de centros de poder local, donde las estructuras menores y mayoritarias de la población, están formadas por granjas y brañas, como la localizada y estudiada por nosotros en las Vallinas/Vachinas (Teverga). La revisión de las cuevas nos lleva a plantear otra visión totalmente diferente del paisaje, donde la mayoría de los yacimientos se corresponden con yacimientos agropecuarios de época medieval y donde la cerámica a mano, que hasta ahora definía los lugares como protohistóricos, es discutida por nosotros. Los estudios complementarios añadidos a la lectura del paisaje nos lleva a plantear la inexistencia de comunidades prerromanas, y la clara presencia, al igual que en el resto del mundo céltico Europeo, de jerarquías sociales que manejan una economía mucho más compleja que la definida primero por los autores romanos, y después impuesta por sectores académicos materialistas durante las últimas décadas.