El príncipe Juan de Trastamara, un "exemplum vitae" para Felipe II en su infancia y juventud
ISSN: 0018-2141
Año de publicación: 1999
Volumen: 59
Número: 203
Páginas: 871-896
Tipo: Artículo
Otras publicaciones en: Hispania: Revista española de historia
Resumen
El origen de la castellanidad de Felipe II se puede vincular con un intenso proceso socializador, que buscaba la identificación del hijo del emperador Carlos con Castilla. El nacimiento del príncipe Felipe fue recibido en España como un acontecimiento de singular importancia histórica, política y social. Tras treinta años sin un príncipe natural heredero, Felipe fue comparado con su antecesor, el príncipe don Juan, hijo de los Reyes Católicos, muerto en 1497. Así, entre 1527 y 1548, la castellanización del futuro Felipe II se ejerció a través de modelos, arquetipos e imágenes sociales, ligados a la figura histórica del príncipe Juan. En Valencia, el nuevo príncipe fue bautizado por los clérigos como el príncipe Felipe Juan, y en 1535 su corte se organizó de acuerdo con la etiqueta castellana, desarrollándose todas las actividades del joven príncipe Felipe bajo esta costumbre hasta 1548, cuando la etiqueta de la Corte fue cambiada por la de Borgoña