El extraño caso de las rocas deslizantes de La Mancha y del Valle de la MuerteAplicación del método científico
ISSN: 1132-9157
Año de publicación: 2016
Volumen: 24
Número: 2
Páginas: 131-142
Tipo: Artículo
Otras publicaciones en: Enseñanza de las ciencias de la tierra: Revista de la Asociación Española para la Enseñanza de las Ciencias de la Tierra
Resumen
Para interpretar los procesos naturales, los investigadores siguen el método científico, que está basado esencialmente en la observación, la formulación de hipótesis y la experimentación. Dicho método representa el instrumento básico que la ciencia utiliza para avanzar. Por tanto, se propone que la metodología científica se enseñe a los estudiantes y, no solo como una mera sucesión de pasos, sino como una parte integral de las clases de ciencias. El alumnado tiene que participar en la investigación y resolución de problemas reales. En este trabajo se ilustra cómo se puede aplicar el método científico en la interpretación de un proceso geológico que desconcierta a sus observadores desde hace décadas. Se trata del movimiento de rocas pesadas, aparentemente autopropulsadas, sobre el fondo llano de lagunas efímeras. Al arrastrarse, las rocas (sliding rocks) dejan tras de sí largas trazas, a modo de surco. Dado que nadie hasta la fecha ha podido documentar fehacientemente qué causa el desplazamiento de las piedras, se han propuesto varias hipótesis que todavía siguen siendo objeto de debate entre los científicos. Hasta 2012, el movimiento de rocas únicamente estaba bien documentado en una laguna del suroeste de EEUU, pero desde entonces se ha reconocido también en un humedal de La Mancha toledana, lo que permite sazonar el enigma y la investigación con el factor proximidad.