Técnicas de forestación de tierras agrarias desde la perspectiva de las relaciones suelo-planta
- Jiménez Morales, María Noelia
- Emilia Fernández Ondoño Doktorvater/Doktormutter
- María Angeles Ripoll Morales Co-Doktorvater/Doktormutter
- Francisco Bruno Navarro Reyes Co-Doktorvater/Doktormutter
Universität der Verteidigung: Universidad de Granada
Fecha de defensa: 06 von November von 2009
- José Aguilar Ruíz Präsident/in
- Juan Lorite Moreno Sekretär/in
- Gianluigi Bacchetta Vocal
- Leopoldo Rojo Serrano Vocal
- Cristina Montiel Molina Vocal
Art: Dissertation
Zusammenfassung
El paisaje de la región mediterránea ha sido modelado durante siglos por la actividad humana, fundamentalmente por la expansión de la agricultura y la ganadería, y actividades ligadas a éstas como el uso del fuego. Sin embargo, a partir de los cambios socioeconómicos y políticos producidos a lo largo del siglo XX, las áreas rurales comienzan a disminuir su población generándose un abandono de los terrenos hasta el momento dedicados a estas actividades. Las consecuencias de este abandono desde el punto de vista ambiental pueden ser diversas, tanto negativas como positivas, dependiendo del contexto. Por un lado, el abandono de tierras agrícolas puede provocar homogeneidad en el paisaje y por consiguiente aumentar el riesgo de incendios, puede favorecer la pérdida de suelo y de recursos hídricos con un aumento de la desertificación, pérdida de diversidad y de valores estéticos y culturales. Por otra parte, el abandono de tierras agrícolas puede también tener consecuencias positivas. Entre éstas, podemos destacar la oportunidad para la regeneración de comunidades vegetales autóctonas, lo que implica una mejora de las propiedades edáficas y un incremento de la biodiversidad. Sin embargo, es ampliamente conocido que los procesos de regeneración natural de la cubierta vegetal en ambientes mediterráneos, especialmente en áreas agrícolas abandonadas, son difíciles y lentos y en ocasiones están impedidos por diversos factores, tanto naturales (climáticos o edáficos), como artificiales (degradación del suelo y pérdida del banco de semillas, falta de fuentes de dispersión, etc.). Diversos autores señalan al respecto que la restauración artificial de estos territorios, puede ser de especial importancia para acelerar la sucesión natural y evitar las consecuencias negativas del abandono. A comienzos de los años 90 la Comunidad Económica Europea consolida a través de la PAC (Política Agraria Común), una intensa política agroambiental comunitaria con la aprobación de los Reglamentos 2078, 2079 y 2080 de 1992, sobre métodos de producción agraria compatibles con las exigencias de la protección del medio ambiente y la conservación del espacio natural, un régimen comunitario de ayudas a la jubilación anticipada en la agricultura, y un régimen comunitario de ayudas a las medidas forestales en la agricultura (programa de forestación de tierras agrarias). Entre los objetivos de este programa, que tiene una especificidad nacional e incluso regional, se encuentran la disminución de excedentes, el incremento a largo plazo de los recursos forestales comunitarios y la gestión del espacio natural de forma más adecuada, evitar la marginación y abandono de tierras, corregir problemas de desertificación, conservación de flora y fauna, diversificación del paisaje, etc. Sin embargo, y a pesar del éxito del programa en España (con la reconversión de unas 685.000 ha para el período 1994-2006), éste se lleva a cabo en la mayoría de los casos sin criterios técnicos, territoriales ni ambientales. Con la aplicación del programa surgen numerosos interrogantes desde el punto de vista científico, especialmente debidos a las diferencias de las condiciones ambientales de los terrenos agrícolas frente a los espacios forestales (normalmente edáficas y microclimáticas), y al empleo masivo y generalizado de especies del género Quercus, lo cual constituye un hecho sin precedentes en la historia de la gestión del medio natural español, y para lo cual faltaban conocimientos desde un punto de vista técnico. Por ello, durante este período se produce una fuerte activación del sector forestal y de la investigación en este ámbito, con el inicio de numerosas líneas de investigación nuevas, entre las que destacan las ligadas a la mejora de la producción de plántulas en vivero y la búsqueda o validación de técnicas de mejora de la supervivencia y desarrollo de las forestaciones, sobretodo realizadas con especies del género Quercus. En este contexto se encuadra esta Tesis, cuyos objetivos fueron evaluar el efecto de diferentes técnicas de preparación del suelo y tratamientos posteriores a la plantación sobre la supervivencia y desarrollo de forestaciones realizadas en tierras agrarias desde el punto de vista de las relaciones suelo-planta, así como analizar la influencia del programa de forestación sobre la biodiversidad a escala de paisaje. Para alcanzar estos objetivos se llevaron a cabo diversos diseños experimentales, la mayoría en cultivos agrícolas abandonados pertenecientes a la finca de experimentación denominada Cortijo del Conejo-Albarrán y Cortijo de Becerra (Guadix, Granada), propiedad de la Consejería de Medio Ambiente (Junta de Andalucía). Esta finca dispone de dos áreas diferentes desde el punto de vista topográfico y ecológico (altiplano del Conejo y rambla de Becerra), contrastadas desde un punto de vista bio- y edafoclimático. En general se trata de un área de termotipo mesomediterráneo superior y de ombrotipo seco-semárido, dedicada al cultivo de cereal y a la ganadería extensiva durante siglos, hasta su abandono en 1993. El altiplano del Conejo se asienta sobre un antiguo glacis, de baja pendiente y con predominio de calcisoles pétricos, mientras que la rambla de Becerra presenta un paisaje acarcavado dominado por regosoles y fluvisoles arénicos. El primero de los estudios [Annals of Forest Science 61: 171-178 (2004)], se realizó en la rambla de Becerra, y consistió en evaluar la eficacia de 8 procedimientos diferentes de preparación del suelo en el establecimiento y crecimiento de una forestación de tierras agrarias realizada con Pinus halepensis Mill. y Quercus ilex L. subsp. ballota (Desf.) Samp. Los resultados muestran cómo los tratamientos puntuales o lineales a los que se le aplican estructuras hidrológicas para la captación de las escorrentías superficiales (microcuencas y caballones) fueron los tratamientos más efectivos, ya que parecen ofrecer a las plántulas un mayor volumen de suelo útil para el desarrollo de su sistema radical y/o una mayor capacidad de retención de agua. Esta efectividad se valoró mediante la supervivencia, crecimientos en altura, diámetro e índice de comportamiento de la forestación. Los resultados de supervivencia variaron considerablemente entre las dos especies (mayor mortalidad en Q. ilex), pero fueron coincidentes en cuanto a la efectividad de los tratamientos. Las dificultades encontradas a la hora de establecer forestaciones de Q. ilex, nos llevó a la realización de nuevos experimentos [publicado en Annals of Forest Science 63: 961-967 (2006)], en los que se evaluó la siembra directa de bellotas de encina teniendo en cuenta, por un lado, el tamaño y peso de la bellota, y por otro lado, el efecto de la preparación del suelo. Se hicieron dos experimentos, uno en vivero bajo condiciones climáticas controladas y otro en campo bajo fuertes condiciones de estrés hídrico (en el altiplano del Conejo). El tamaño y peso de la bellota fueron los factores que más controlaron el desarrollo de esta especie en el experimento realizado en el vivero. Sin embargo en el experimento de campo, bajo condiciones de fuerte estrés hídrico, no existieron estas relaciones ni siquiera después de 32 meses de desarrollo. Al contrario de lo que se preveía, la preparación previa del terreno (ahoyado con retroexcavadora) afectó negativamente a la supervivencia, diámetro y relación biomasa aérea/biomasa radical con respecto al control. Esto pudo deberse a cambios en las propiedades químicas del suelo provocadas por el volteo de horizontes en el momento de la preparación, especialmente aumentos de la concentración de CaCO3 y disminución en la disponibilidad de P y K. A pesar de ello, la supervivencia fue muy elevada pese a las condiciones de estrés y se aconseja como técnica de forestación siempre que se tengan en cuenta ciertas premisas (adecuada selección de la bellota, correcto almacenamiento, tratamiento pregerminativo...). La aplicación de tratamientos culturales realizados con posterioridad a la plantación, también son técnicas muy habituales en las forestaciones de tierras agrarias. La instalación de protectores, frecuentemente del tipo tubo invernadero ha sido una práctica muy generalizada. El trabajo en el que evaluamos el efecto del protector de tubo invernadero sobre el establecimiento y crecimiento de la sabina albar (Juniperus thurifera L.), constituye uno de los primeros experimentos de campo con esta especie en su área de distribución natural [Annals of Forest Science 62: 717-725 (2005)]. El protector aumenta la temperatura máxima y reduce la radiación entre un 70-90%, lo que provoca que las plantas crezcan excesivamente en altura y consecuentemente presenten un índice de esbeltez excesivo, el cual causa problemas de desproporción morfológica y desestabilización. Igualmente desproporciona la relación entre biomasa aérea y biomasa radical, siendo éste un parámetro destructivo de gran importancia pero pocas veces utilizado en trabajos de este tipo. La reducción de la radiación dentro del protector igualmente incrementa la superficie foliar de las plantas con un detrimento significativo de la biomasa de raíces, lo que constituye la clave para su supervivencia en climas en los cuales los recursos hídricos son escasos y las plantas están sujetas a largos períodos de xericidad. Los sistemas agrarios están muy empobrecidos en nutrientes, lo puede limitar el desarrollo de las forestaciones. Por este motivo, nos propusimos también evaluar la influencia, en este caso de 9 tratamientos post-plantación, en la evolución y desarrollo de una forestación con encinas, usando como variables respuesta la supervivencia, superficie foliar y concentración de macro y micronutrientes en hojas [Trees 21: 443-455 (2007]). Existen pocos trabajos en los que se teste, mediante índices no destructivos, el efecto de estos tratamientos post-plantación a través del análisis de nutrientes, menos aún en encina u otras especies mediterráneas. Todos los tratamientos que se aplicaron en este estudio, llevados a cabo en el altiplano del Conejo, incrementaron el porcentaje de supervivencia de las plántulas con respecto al tratamiento control, excepto la aplicación de residuos sólidos urbanos, siendo en todos los casos superior al 70 % (lo cual es bastante elevado considerando esta especie y las características de la localidad). En general, la aplicación de residuos forestales, y especialmente la colocación de piedras grandes en la banqueta de plantación, resultaron ser los tratamientos más eficaces para el aprovechamiento de los nutrientes. Los riegos, a parte de ser económicamente costosos, fueron efectivos solo mientras duró su aplicación, coincidiendo con los resultados de otros estudios. Finalmente, la evaluación de los efectos de la aplicación de políticas de reconversión de terrenos agrícolas en forestales desde un punto de vista de la conservación de la biodiversidad, el suelo y el paisaje, es un tema que también se consideró [Annals of Forest Science, enviado]. De los resultados obtenidos de la evaluación de 51 forestaciones diseminadas en aproximadamente 5.220 km2 (25% del total de forestaciones de las comarcas granadinas de Guadix, Baza y Huéscar), se puede inferir que el programa de forestación de tierras agrarias puede estar favoreciendo la conservación biológica de especies de plantas, aumentando la diversidad en aproximadamente un 50% cuando lo que se transforman son cultivos de cereal en forestaciones. Además, un 24,2% de las especies que se catalogaron tienen un área de distribución relativamente restringida (endemismos íbero-norteafricanos, ibéricos, o del S-SE peninsular). Todo ello depende en buena medida de la variabilidad ambiental, con fuerte influencia de factores edáficos, litológicos y climáticos, así como del uso previo del suelo y otros factores geográficos como proximidad de las forestaciones a restos de vegetación autóctona, etc... Sin embargo, y a pesar de estos resultados, en España las forestaciones de tierras agrarias se han realizado sin una planificación territorial previa, con vagas indicaciones ambientales y sin criterios técnicos específicos. En este sentido, se propone la evaluación previa de las zonas que pueden ser reforestadas para optimizar las ayudas en cuanto a conservación biológica se refiere, englobando la mayor parte de variabilidad ambiental existente a escala regional y maximizando los impuestos de los contribuyentes con los que se financian estos programas. En conclusión, esta tesis aporta nuevos datos científicos acerca de la idoneidad de diferentes técnicas de forestación de tierras agrarias, desde una perspectiva de las relaciones suelo-planta, y se proponen propuestas de planificación del programa de forestación en el ámbito mediterráneo.