Accion protectora del reta frente a las contingencias de jubilación y cese de actividad o desempleo

Resumen

Desde el Pacto de Toledo de 1995 han sido varias las reformas que se han ido acometiendo dentro de nuestro sistema público de Seguridad Social con el doble propósito de conseguir: por un lado, la homogeneidad entre la protección dispensada por los distintos regímenes que integran el Sistema, teniendo como referente central el Régimen General de Seguridad Social (Recomendación 6ª); y por otro lado, la simplificación e integración de los diferentes regímenes especiales que forman parte del Sistema (Recomendación 3ª), a fin de que todos los trabajadores profesionalmente activos (o asimilados) queden finalmente encuadrados, bien el Régimen General o bien en el Régimen Especial de Trabajadores por cuenta propia o Autónomos (también conocido con las siglas RETA). De manera que este doble propósito reformista ha provocado: en primer lugar, que el RETA se haya situado en el mismo nivel que el Régimen General por su importancia cuantitativa, albergando a un colectivo cada vez más amplio que refleja el auge de la iniciativa privada y el autoempleo, así como de la creciente deslaboralización y flexibilización del mercado laboral que se está produciendo en los últimos años (provocando un desplazamiento del trabajo por cuenta ajena al trabajo por cuenta propia); y en segundo lugar, que la acción protectora del RETA haya sido objeto (especialmente en las últimas décadas) de un constante e intenso proceso de reforma con el fin de situarla más próxima a la del Régimen General. Así pues, tal proceso reformista orientado a conseguir una mayor homogeneidad entre la acción protectora del RETA y del Régimen General, ha tenido una especial incidencia en el régimen jurídico de la pensión de jubilación de los trabajadores por cuenta propia. Aun cuando se trata de una contingencia protegida por el RETA desde su configuración inicial, ha sido objeto de numerosas e importantes reformas que se han intensificado en la última década dentro de la aludida lógica homogeneizadora. Y por lo que respecta a la prestación por cese de actividad, la relevancia e interés de su estudio radica principalmente en su novedad. Constituye el último hito jurídico significativo en la protección social de los trabajadores por cuenta propia, y una importante materialización del principio de homogeneización (al intentar suplir una carencia histórica de la acción protectora de este colectivo) y del principio de simplificación de regímenes, al incluir dentro de su ámbito subjetivo de aplicación a todos los trabajadores por cuenta propia integrados en el Sistema de Seguridad Social (ya sea en el RETA o el RETM).