Los dominicos en Toledo durante la baja Edad Mediaaspectos institucionales, económicos y espirituales

Resumen

La Tesis recoge la trayectoria de la orden dominica en Toledo desde que en el siglo XIII se produce el primer asentamiento extramuros de la ciudad, en el convento de San Pablo, hasta su traslado en 1407 al emplazamiento intramuros de San Pedro Mártir. A lo largo de los tres siglos de historia contemplados, se ha podido comprobar el progresivo enriquecimiento patrimonial de los dominicos, a partir de donaciones, compras de propiedades rurales y urbanas, y mandas testamentarias. Paralelamente, la orden completa su proyección social en el desarrollo de la piedad popular, manifestada en la fundación de capellanías y oficios funerarios, así como en la creación de la Capilla Mayor del convento, pensada para servir de enterramiento a la poderosa familia Silva. Igualmente, los dominicos de Toledo desarrollaron una relación privilegiada con la monarquía castellana, representada en la concesión de diversos privilegios y rentas, entre los que destacaremos el privilegio de impresión de la Bula de Cruzada. Ello hizo del taller de impresión que los dominicos instalaron en San Pedro Mártir, uno de los primeros talleres tipográficos de Toledo. La Bula de Cruzada se imprimió en el mismo hasta 1808. Por último, es de destacar la relación que los dominicos de Toledo mantuvieron con otras instancias religiosas en la ciudad, especialmente con los monasterios femeninos, también dominicos, de Santo Domingo el Real y Madre de Dios, así como con el Beaterio del Espíritu Santo, contribuyendo a la instalación de la reforma observante en la ciudad de Toledo. En suma, una trayectoria rica y fecunda, que ha podido conocerse gracias a la consulta de diversos archivos españoles e italianos, que han permitido incrementar considerablemente el volumen de documentación que hasta hora se había manejado sobre los dominicos toledanos.