Perfiles jurídicos de la figura del Virrey americano. El caso de Nueva Granada

  1. MAQUEDA ABREU, CONSUELO
Dirigida por:
  1. Feliciano Barrios Pintado Director

Universidad de defensa: Universidad de Castilla-La Mancha

Fecha de defensa: 10 de noviembre de 2005

Tribunal:
  1. José Antonio Escudero López Presidente/a
  2. José María Vallejo García Hevia Secretario
  3. Emma Montanos Ferrín Vocal
  4. David Roberto Torres Sanz Vocal
  5. Marta María Lorente Sariñena Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 134213 DIALNET

Resumen

La tesis ha sido elaborada sobre documentación inédita recogida en diversos centros de investigación españoles y extranjeros, especialmente en el Archivo General de Indias y en el Archivo General de la Nación en Bogotá; empieza estableciendo el marco gubernamental de la Monarquía hispánica y la situación del oficio de Virrey en ese entramado institucional, para continuar con la caracterización especifica del Virrey de Nueva Granada y sus titulares en un proceso que se inicia por la elección del candidato y las Instrucciones que recibe para desempeñar el cargo en un virreinato de nueva creación, al que llega tras un largo viaje, que por lo general se inicia en España, donde suele concluir, si el Virrey no es destinado a otro Virreinato. El proceso institucional que lleva a la creación del Virreinato de Nueva Granada es uno de los puntos fuertes del estudio que nos ocupa. Cronológicamente abarca desde el inicio de ese proceso en 1717 hasta 1780. Una creación efímera (1717-1723), en principio, y una recreación posterior (en 1739), esta vez definitiva, nos muestran los diversos intereses en juego y los motivos que inducen al gobierno a ponerlo en marcha en un espacio geográfico de enorme interés, ya que el contrabando, la presencia de extranjeros y las dificultades naturales del territorio, rico en recursos, hacían necesaria la medida. Sobre ese espacio van a desarrollar su gestión los diversos virreyes que se suceden en el mando, cuyo estudio es el núcleo fundamental de este trabajo. En un primer momento, la situación resulta bastante vidriosa por las no menos vidriosas posiciones de los dos hombres vinculados al origen del Virreinato -Pedrosa y Villalonga-, pero después de 1739 la situación se normaliza y los Virreyes se suceden sin problemas (Eslava, Pizarro, Solís, Mesía de la Cerda, Guirior y Flores), analizándose pormenorizadamente las diversas facetas de su gobierno, pudiendo comprobar la especie de ""bic