Inducción del trabajo de partoresultados perinatales y modelos de predicción de riesgo de cesárea

  1. Hernández Martínez, Antonio
Dirigida por:
  1. Ana Pascual Pedreño Director/a
  2. Milagros Molina Alarcón Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Castilla-La Mancha

Fecha de defensa: 28 de octubre de 2014

Tribunal:
  1. Vicente Martínez Vizcaíno Presidente/a
  2. Carlos Moreno Sanz Secretario/a
  3. Jesús S. Jiménez López Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La inducción del parto (IDP) es la iniciación del trabajo de parto mediante procedimientos médicos o mecánicos antes del comienzo espontáneo del mismo. Se trata de una de las intervenciones más frecuentes en Obstetricia y se asocia a un incremento en las complicaciones frente al parto espontáneo, destacando la práctica de un mayor número de cesáreas. Objetivos: Determinar la relación entre la IDP y los principales resultados perinatales, así como elaborar un modelo predictivo de riesgo de cesárea en gestantes con IDP. Método: Para el estudio de los resultados perinatales se utilizaron 2 cohortes históricas de 841 inducciones y 2.534 partos espontáneos, mientras que para la elaboración del modelo predictivo se emplearon una sola cohorte de 704 partos inducidos, realizados entre 2009 y 2011 en el Hospital ¿Mancha-Centro¿ de Alcázar de San Juan. Se empleó análisis multivariante por medio de regresión logística binaria para control de la confusión y construcción de los modelos predictivos, así como áreas bajo las curvas (AUC) ROC para determinar la capacidad predictiva. Resultados: La prevalencia de IDP fue del 22,9%, presentándose como indicaciones más frecuentes: rotura prematura de membranas con un 22,7% y diabetes con un 22,5%. Se observó relación entre inducción y riesgo de cesárea tanto en mujeres nulíparas (OR= 2,68; Intervalo de confianza [IC] 95%: 2,15-3,34) como en multíparas (OR=2,10; IC95%: 1,72-2,57). La indicación con mayor riesgo de cesárea fue la gestación cronológicamente prolongada (GCP) con un 37,1%. La IDP también se relacionó con la mayor duración de la dilatación (OR=6,00; IC95%: 4,02-8,95), empleo de epidural (OR=3,10; IC95%: 2,24-4,29) y necesidades de transfusión sanguínea (OR=3,33; IC95%: 1,70-9,67). No se encontró relación con la duración del expulsivo, práctica de episiotomía, desgarros, sangrado excesivo y rotura uterina. Tampoco encontramos relación estadística entre inducción y los indicadores de morbilidad (pH arteria < 7,10, puntuaciones de Apgar a los 5 minutos < 7 y necesidades de reanimación neonatal tipo III-IV). En cuanto a la elaboración de los modelos predictivos, encontramos que los factores predictores que se mantienen en el modelo final fueron: talla materna, índice de masa corporal, nuliparidad, test de Bishop, edad gestacional, macrosomía, sexo fetal y tasa global de cesárea del ginecólogo. La capacidad predictiva del modelo fue en el momento del ingreso hospitalario (Modelo A) del 0,76 (IC95%: 0,73-0,80) y para el ingreso en la sala de dilatación (Modelo B) del 0,79 (IC95%: 0,76-0,83). La capacidad predictiva para las gestantes con cesárea anterior fue (Modelo A) del 0,79 (IC 95%: 0,64-0,94) y del (Modelo B) 0,80 (IC 95%: 0,64-0,96). Conclusiones: La IDP es un factor de riesgo para una mayor duración de la dilatación, empleo de analgesia epidural, necesidad de transfusión sanguínea y de cesárea tanto en mujeres nulíparas como en multíparas. No se observa relación entre IDP y los indicadores de morbilidad neonatal. Los modelos de predicción de riesgo de cesárea elaborados presentan una capacidad predictiva satisfactoria. La herramienta puede ser de utilidad para la práctica clínica, especialmente en gestantes con cesárea anterior.