La paradoja del deseo en René Girard

  1. PARRILLA MARTÍNEZ, DESIDERIO
Dirigida por:
  1. Alejandro Llano Cifuentes Director/a
  2. Eloy Rodríguez Navarro Codirector

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 16 de enero de 2008

Tribunal:
  1. Manuel Cabada Castro Presidente
  2. Carlos Fernández Liria Secretario
  3. Celina Arana Cañedo-Argüelles Vocal
  4. Carles Llinàs Puente Vocal
  5. Diego Sánchez Meca Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 145478 DIALNET

Resumen

Para René Girard el hombre está marcado por la mimesis. Pero esta limitación, a diferencia de Aristóteles y Platón, implica una dimensión conflictiva. La violencia aparece como el gran peligro que amenaza las relaciones humanas. Es la relación de imitación entre un sujeto y su modelo lo que da al deseo su carácter conflictivo. Sin embargo, la amistad y el antagonismo, el amor y el odio, la atracción y la repulsión, proceden del mismo impulso; de manera que el núcleo del deseo alberga una estructura paradójica en su interior. El cuadro resultante será una comunidad de "hermanos-enemigos" en la que cualquier conflicto amenaza con una violencia interminable que desemboque en una crisis que ponga en peligro su propia existencia. Para conservar el orden social se hace necesario expulsar del seno de la comunidad esa violencia precisamente mediante la violencia. De hecho, todo orden social y cultural está fundado por la violencia unánime en torno a una víctima. Se trata del mecanismo del chivo expiatorio presente en la formación de los distintos órdenes culturales. La violencia, por tanto, amenaza constantemente la estabilidad del orden social. La función primordial de la religión será mantener alejada de la comunidad esa violencia. El método del que se ha servido es el sacrificio: hacer converger toda la violencia hacia una víctima. El orden nace del desorden; la paz, de la violencia. Esta ambivalencia de la violencia es, en definitiva, la paradoja de lo sagrado, deriva a su vez de la mimesis del deseo. Y esta paradoja se prolonga en el orden social que funda y ordena (ritos, mitos, prohibiciones, signos diferenciados, etc.). Finalmente, Girard reivindica la relevancia de los Evangelios en general y el relato de la Pasión concretamente, pues describen explícitamente todo el sistema de chivo expiatorio. La Revelación cristiana denuncia la ley de la violencia y rehabilita todas las víctimas. Pero el cristianismo desmitifica el mundo por