Nefropatía inducida por contraste intravenoso: eficacia comparativa en la prevención de la aplicación de un protocolo de hidratación intravenosa (IV) y oral
- Martín Moreno, Paloma L.
- Nuria García Fernández Doktorvater/Doktormutter
Universität der Verteidigung: Universidad de Navarra
Fecha de defensa: 09 von Februar von 2016
- María Pilar Civeira Murillo Präsident/in
- Pablo Monedero Rodríguez Sekretär/in
- Francisco Javier Gainza Ríos Vocal
- Julio Pascual Santos Vocal
- Alberto Tejedor Jorge Vocal
Art: Dissertation
Zusammenfassung
Introducción: La Nefropatía Inducida por Contraste (NIC) es una causa frecuente de fallo renal que se asocia a una estancia hospitalaria más prolongada y aumento de la morbilidad y mortalidad. Evaluamos en una población de riesgo bajo de desarrollar NIC, la eficacia en la prevención de un protocolo de hidratación oral vs intravenosa, y analizamos la utilidad de biomarcadores en su detección precoz. Material y métodos: Estudio aleatorizado, controlado y unicéntrico en el que se incluyeron 130 pacientes (62,3% hombres), que fueron asignados a recibir 3 mL/kg/h intravenoso (iv) de Bicarbonato sódico 1/6 M 1 hora antes de la administración del contraste (n = 43), 75 mL/10 kg de peso vía oral de una solución comercial de Citrato repartido en 4 tomas durante las 4 h previas a la administración del contraste (n = 43), o no hidratación específica (n = 44). Biomarcadores analizados: creatinina y cistatina C (pre- y 24 h post-), Neutrophil Gelatinase- Associated Lipocalin (pre- y 4 h post-) en suero y en orina, interleuquina-8 (pre- y 12 h post-) en suero y en orina, Superóxido dismutasa (pre- y 4 h post-) en suero, isoprostanos (pre- y 12 h post-) en orina, cardiotrofina-1 (pre-, 4 h y 12 h post) en suero y orina, además de creatinina en orina (pre-, 4 h y 12 h post-) para corrección de todos los parámetros urinarios. En 10 pacientes de cada grupo se analizó la actividad de la Nicotinamida Adenina Dinucleótido Fosfato (NADPH) oxidasa en monocitos (pre, 4 h y 24 h post-). Resultados: La incidencia de NIC fue de 9,2% en la población total sin diferencias entre los 3 grupos de hidratación (7% en el grupo iv, 11,6% en el grupo oral y 9,1% en el grupo sin hidratación específica). No hubo diferencias significativas en el cambio de los biomarcadores por grupo de hidratación. El cociente cistatina C/creatinina basal fue un buen predictor del desarrollo de NIC a las 24 h (AUC: 0,76; 95% IC: 0,64-0,88) y con un valor de 0,95 mg/L/mg/dL la sensibilidad fue de 91,7%. Se observó un descenso significativo (p<0,001) de creatinina y del cociente cardiotrofina-1/creatinina en orina a las 4-12 h de la administración de contraste en la población total (n = 130). Conclusiones: En una población de bajo riesgo (excluidos diabéticos y pacientes con enfermedad renal crónica), el efecto de hidratación oral fue comparable a la iv en la incidencia de NIC y sin cambios significativos en los biomarcadores de daño renal analizados. El cociente cistatina C/creatinina basal parece ser un buen predictor del desarrollo de NIC. El descenso de la creatinina y del cociente cardiotrofina-1/creatinina urinarios podrían reflejar la vasoconstricción asociada al contraste iv.