El alma de los brutos en la filosofía española del siglo XVIII, en el entorno del padre Feijoo. Análisis desde el materialismo filosófico
- RODRÍGUEZ PARDO, JOSE MANUEL
- Gustavo Bueno Sánchez Director/a
Universidad de defensa: Universidad de Oviedo
Fecha de defensa: 11 de junio de 2004
- Isidro Peña Garcia Vidal Presidente/a
- Tomás-Ramón Fernández Rodríguez Secretario
- Teófilo González Vila Vocal
- Silverio Cerra Suárez Vocal
- Roberto Albares Albares Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
El objetivo de nuestra tesis es analizar en primer lugar el discurso publicado en 1729 por el Padre Benedictino Benito Jerónimo Feijoo (fundador del ensayo filosófico en lengua española), titulado "Racionalidad de los brutos" e incluído dentro del tercer tomo de su famosa obra Teatro Crítico Universal. En dicho discurso, el benedicto español defendió la tesis que otorga racionalidad y voluntad, al igual que al hombre, a los animales. Dicha doctrina presenta numerosas problemáticas y contradicciones dentro de la filosofía escolástica, pues esta doctrina sólo admite racionalidad en los hombres. De hecho, sólo dos autores españoles se decidirán a impugnar parcialmente la tesis de Feijoo: su amigo y médico Martín Martínez, en el Diálogo Décimo de su Filosofía Escéptica, publicada en 1730 y el jesuita Francisco Javier de Idiázquez, en varias páginas de un Cursus Philosophicurs dictado por él entre los años 1747 y 1748. Ambas críticas, aunque desde distintas perspectivas ( la primera realizada desde el escepticismo, la segunda desde el escolasticismo) se mueven dentro de la concepción que otorga sensación a los animales y les niega racionalidad. Sin embargo, y como constatamos a continuación, no fue en España, sino en el país vecino, Portugal, donde más atención se prestó a la doctrina de la racionalidad de los brutos defendida por el Padre Feijoo. Concretamente, fue Miguel Pereira de Castro Padrao, consejero real de la Corona Portuguesa, quien defendió al Padre Feijoo en su obra titulada Propugnación de la racionalidad de los brutos, publicada en Lisboa en 1753. En la citada obra, Pereira de castro defiende al Padre Feijoo de la crítica realizada, por anónimo autor francés, denominado Monsieur N., que ha enviado presuntamente una carta al benedictino para, desde posiciones cartesianas, defender que los animales son máquinas y no seres dotados de entendimiento y voluntad. No obstante, la más interesan