Evaluación de un programa de optimización del uso de antimicrobianos en un hospital universitario

  1. Benítez Gutiérrez, Laura María
Dirigida por:
  1. Elena Múñez Rubio Director/a
  2. Mª Carmen Mendoza Fernández Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 26 de marzo de 2015

Tribunal:
  1. Valentín Cuervas Mons Martínez Presidente/a
  2. Juan Antonio Vargas Núñez Secretario/a
  3. Rodrigo García Madero Vocal
  4. Amalia Torralba Arranz Vocal
  5. Raquel Barba Martín Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La medicina moderna ha permitido grandes avances en el control de la mortalidad a través del uso de antimicobianos, tanto en infecciones graves como en el desarrollo de procedimientos médicos y quirúrgicos bajo profilaxis antibiótica. En la actualidad, la propagación de gérmenes resistentes a los antibióticos de los que disponemos es una realidad que ha llegado a alcanzar las dimensiones de un serio problema de salud pública a nivel mundial. La era dorada de los antimicrobianos, que tuvo lugar entre el período comprendido entre 1930 y 1960, parece haber finalizado. Durante estos años, se descubrieron la mayoría de los antimicrobianos de los que disponemos en la actualidad y su eficacia se mantuvo prácticamente íntegra hasta los años 60. Desde entonces, han ido incrementándose los aislados de bacterias resistentes en prácticamente todos los territorios geográficos y políticos del mundo. Debido a esto, en los últimos años en Europa, se han reforzado los sistemas de vigilancia epidemiológica a través de los diferentes países que conforman la Unión Europea. El último informe del Centro Europeo de Control de Enfermedades Infecciosas (European Center for Disease Control, ECDC) pone de manifiesto el ascenso progresivo de gérmenes resistentes incluso a los antimicrobianos de última generación. Este hecho es especialmente llamativo en el caso de las bacterias gram negativas, que suponen más de 50.000 infecciones causadas por gérmenes multiresistentes, de un total de más de tres millones de infecciones hospitalarias anuales. También se estima en 1.500 millones de euros los sobrecostes y la pérdida de productividad causadas por las resistencias. El ECDC señala, entre otros factores, el mal uso y abuso de los antimicrobianos como una de las principales causas que potencia la propagación de resistencias. La investigación por parte de la industria farmacéutica, sobre el desarrollo de nuevos antimicrobianos eficaces ha fracasado, en general, hasta el momento. Esto ha favorecido que en los últimos años se dediquen pocos recursos al desarrollo de antibióticos, que invariablemente pierden su eficacia tras la aparición de resistencias por parte de los agentes infecciosos. Ante esta situación, varias organizaciones internacionales como la Sociedad Americana de Enfermedades Infecciosas (IDSA), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Foro Económico Mundial, han convertido este asunto en el tema principal de sus informes, conferencias y líneas de trabajo en los últimos años. La promoción de la difusión del conocimiento de este problema, junto a las posibles estrategias de acción para controlarlo, se han convertido en una prioridad para las sociedades científicas y médicas. En España, las Sociedades de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica, de Farmacia Hospitalaria y de Medicina Preventiva han elaborado un documento de consenso mediante el que instan a implantar programas de optimización del uso de antimicrobianos (PROA) en los hospitales como una medida imprescindible en el control de la propagación de bacterias resistentes a los antimicrobianos y en la potenciación de la preservación de la eficacia de estos fármacos. Esta tesis doctoral es el resultado del análisis sobre la viabilidad de la implementación de un programa de este tipo en el Hospital Universitario Puerta de Hierro Majadahonda. Nuestro objetivo fue valorar el impacto producido sobre las variables que miden calidad clínica sobre pacientes y el consumo de antimicrobianos, así como la adherencia a las recomendaciones realizadas por los especialistas en enfermedades infecciosas. Se realizó un estudio del tipo asesoría prospectiva con emisión de recomendaciones y comparación de resultados con series temporales interrumpidas. El programa consistió en el asesoramiento del tratamiento antimicrobiano prescrito a todos los pacientes trasladados desde una unidad de cuidados intensivos (UCI) a una planta de hospitalización. La asesoría fue realizada por los expertos en enfermedades infecciosas (EEI) de forma sistemática sobre los 268 pacientes que estaban recibiendo tratamiento antibiótico al alta de la UCI en el período comprendido entre enero-junio 2012. No fue necesaria la solicitud previa de una interconsulta por parte de los médicos prescriptores. Se demostró una elevada adherencia por parte de los médicos prescriptores a las recomendaciones dadas, una disminución media de 2 dosis diarias definidas (DDD) del consumo de antibióticos durante el período de intervención y una disminución del porcentaje de pacientes que recibió tratamiento antimicrobiano endovenoso desde el traslado de la unidad de cuidados intensivos hasta el alta, respecto a un período similar previo (siendo de 71% fente a 80%, respectivamente). Finalmente, se demostró una disminución de la estancia media hospitalaria de un día desde el traslado de la unidad de cuidados intensivos y el momento del alta hospitalaria. No se encontró un aumento de reingresos por complicaciones infecciosas, ni un aumento de mortalidad en el grupo de pacientes cuyo tratamiento fue modificado según las recomendaciones dadas, frente al grupo de pacientes cuyo tratamiento no fue modificado a pesar de recibir recomendaciones. Por tanto, la implementación y el funcionamiento de un programa de optimización del uso de antimicrobianos en los pacientes trasladados desde una UCI en el Hospital Universitario Puerta de Hierro ha demostrado ser eficaz en el descenso global del consumo de antimicrobianos y en la mejora de la calidad asistencial de los pacientes.