Sor María de Jesús de Agredaentre la obediencia religiosa a Roma y la práctica política de la monarquía católica

Resumen

En los últimos años la figura de sor María de Jesús de Ágreda (1602-1665) ha sido objeto de varios estudios. El interés por la misma arrancó en la penúltima década del siglo XIX, cuando don Francisco Silvela dio a la imprenta la correspondencia epistolar que mantuvo con Felipe IV por espacio de veinte y dos años. Desde entonces, las publicaciones se han multiplicado, habiéndose centrado fundamentalmente en su labor como monja escritora, su representación en el arte y su relación con el monarca. Sin embargo, su figura y obra todavía no han sido contextualizadas dentro de las relaciones de la Monarquía Católica con el Papado durante los años centrales del siglo XVII. Asimismo, aunque en esos años la Monarquía Católica terminó por asumir la ideología religiosa de Roma como justificación de su praxis política y razón de ser, este proceso ha pasado prácticamente desapercibido. Para cubrir este vacío se toma como referencia la figura de sor María de Ágreda. A través de este personaje puede contemplarse en toda su plenitud la ideología religiosa que el Papado implantó en la Monarquía Católica durante la primera mitad del Seiscientos. Ahora bien, es preciso aclarar que no fue la promotora de la citada transformación, dado que ésta comenzó a principios de la centuria. Cumpliendo con lo dispuesto por Felipe IV, le expuso el comportamiento que debía adoptar y las coordenadas por las cuales había de discurrir su monarquía, siempre en consonancia con la ideología religiosa de Roma.