Anatomía funcional y paleobiología de Magericyon anceps (Amphicyonidae, carnivora) del Complejo de Yacimientos Vallesienses (Mioceno superior, mn 10) del Cerro de los Batallones (Torrejón de Velasco, Madrid)

  1. Siliceo Nicolás, Gema
unter der Leitung von:
  1. Manuel Jesús Salesa Calvo Doktorvater/Doktormutter
  2. Jorge Morales Romero Co-Doktorvater/Doktormutter

Universität der Verteidigung: Universidad de Alcalá

Fecha de defensa: 09 von Juni von 2015

Gericht:
  1. Humberto Astibia Ayerra Präsident/in
  2. Ignacio Martínez Mendizábal Sekretär
  3. Plini Montoya Belló Vocal
  4. Àngel Galobart Lorente Vocal
  5. Borja Figueirido Vocal

Art: Dissertation

Teseo: 539639 DIALNET

Zusammenfassung

Magericyon anceps es un carnívoro de la familia Amphicyonidae descrito como género y especie nueva en el yacimiento Mioceno (Vallesiense, MN 10) de Batallones -1 (Torrejón de Velasco, Madrid). Esta tesis se centra en el estudio de la anatomía funcional, paleobiología y paleoecología del esqueleto de Magericyon anceps, tanto craneal como postcraneal. La excepcional muestra de Batallones-1 puede ser considerada como una de las mejores asociaciones de anficiónidos del registro fósil a nivel mundial debido a la representación de la práctica totalidad de los elementos de su esqueleto, así como los numerosos elementos asociados presentes en el yacimiento, y permite un estudio pormenorizado de esta especie fósil. Este estudio comprende tres partes principales: una primera parte descriptiva en la que se caracteriza morfológica y biométricamente el esqueleto de M. anceps y se compara con otros carnívoros (actuales y fósiles); una segunda parte en la que se infieren las implicaciones funcionales de esta morfología; y una tercera parte en la que se infieren aspectos paleobiológicos y paleoecológicos de esta especie. En su conjunto M. anceps muestra una morfología única entre todos los carnívoros analizados, constituyendo un modelo de depredador con entidad propia. Sus caracteres dentarios y cráneo-mandibulares de indican una dieta hipercarnívora en el contexto de los Amphicyoninae, lo que sugiere hábitos cazadores. Su región cervical muestra características que sugieren una gran capacidad de rotación y movilidad lateral de cuello y cabeza, y su región toraco-lumbar, muestra una gran rigidez principalmente en la zona lumbar, algo que indica una mayor resistencia a las tensiones producidas durante la caza, en la cual, la fuerza ejercida por la extremidades torácicas durante el forcejeo y la sujeción de la presa, generan fuertes tensiones sobre la zona lumbar. La extremidad torácica de M. anceps sería muscularmente potente y por tanto, esencial para el derribo y control de las presas durante la caza, y la configuración del carpo indica que M. anceps sería probablemente semipalmígrado o digitígrado. La extremidad pélvica, muestra una eficiente estabilización de sus articulaciones así como un gran rango de flexión y extensión, algo que sugiere una gran potencia de propulsión en la carrera. Además, la articulación entre tibia y astrágalo indica que aunque M. anceps mostraría una postura plantígrada en reposo, el grado de apoyo podría ser variable, permitiéndole adoptar una postura semiplantígrada o digitígrada de forma habitual. La masa corporal estimada para M. anceps coloca a esta especie entre los anficiónidos de mayor tamaño, que superaron los 150 kg de masa corporal. La población de M. anceps en Batallones-1, compuesta en su mayoría por individuos juveniles y adultos jóvenes, unido a una ausencia de dimorfismo sexual y de báculos en la muestra, hace factible la hipótesis de que la muestra carezca de machos adultos. Esta población, podría estar compuesta sólo por hembras y juveniles, dando indicios de un posible cuidado parental proporcionado sólo por las hembras y en el que las crías seguirían a su madre en la búsqueda de alimento, aprendiendo a cazar; esto explicaría que penetraran en la cavidad de Batallones-1 atraídas por el olor a carroña. Magericyon anceps sería un depredador activo de hábitos terrestres, que cazaría a sus presas en solitario y al acecho, necesitando zonas con cierta cobertura vegetal para cazar. Es probable que evitara cazar en espacios abiertos, donde sería más fácilmente detectado por sus posibles presas, y por el súperdepredador de la comunidad de Batallones, Machairodus aphanistus, que podría robarle las presas e incluso matarle. Entre las presas más probables de M. anceps se encontrarían el suido Microstonyx sp., el mósquido Micromeryx soriae y los cérvidos, especies que estarían ligadas a hábitats relativamente estructurados.