Lectura y naciónla novela por entregas en Colombia (1840-1880)

  1. Acosta Peñaloza, Carmen Elisa
Dirigida por:
  1. Antonio Lorente Medina Director/a

Universidad de defensa: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Año de defensa: 2006

Tribunal:
  1. Teodosio Fernández Presidente/a
  2. Jaime J. Martínez Martín Secretario/a
  3. Francisco Gutiérrez Carbajo Vocal
  4. Juana Martínez Gómez Vocal
  5. Trinidad Barrera López Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 138533 DIALNET

Resumen

La relación entre prensa y novela se constituyó en el medio privilegiado por el cual la elite neogranadina adjudicó una función social a la literatura, papel que no abandonaría sino hasta las últimas décadas del siglo. La novela se consolidó como difusora propagandística de las ideas y opiniones políticas constituyéndose, en el siglo XIX, en vehículo doctrinario, en novela de tesis preconcebida y en novela como réplica social. El caso neogranadino y quizá latinoamericano, tuvo el carácter particular que las publicaciones por entregas que se leyeron fueron mayoritariamente extranjeras fundamentalmente españolas y francesas, por esto la constante hipótesis o afirmación de que la literatura del siglo XIX se consolidó como una copia de dicha literatura. Revisando esta afirmación interesa plantear aquí que no se puede pensar la función de la novela nacional sin relacionarla de manera indisoluble con la publicaciones extranjeras que compartieron el proceso lector y de esta manera descubrir la forma como coexistieron. Esto a la vez nos conduce a pensar en la importancia que tuvo la circulación de los textos, el problema de legitimación y en tanto de la lectura. Es así como no puede negarse el papel ideológico de la novela por entregas y su participación la fundación de la nación por la palabra. La publicación estuvo determinada por la mediación del editor del periódico de la imprenta en una consciente y a veces explícita preocupación por el lector y los efectos de la lectura. Esta función social fue configurada desde los propósitos del escritor, la realidad textual y la actividad de lectura. Se tuvieron en cuenta entonces, las prácticas, usos o apropiaciones que los textos podían hacer los lectores y desde su publicación se buscó intervenir en las formas de construcción de sentido.