La antropología de Francisco Giner de los Ríosel problema del hombre

  1. Payo de Lucas, Jesús Pedro
Dirigida por:
  1. Anselmo Manuel Suances Marcos Director/a

Universidad de defensa: UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia

Fecha de defensa: 25 de junio de 2009

Tribunal:
  1. Diego Sánchez Meca Presidente/a
  2. Teresa Oñate Zubía Secretaria
  3. Alfonso Maestre Sánchez Vocal
  4. Antonio Miguel López Molina Vocal
  5. Ricardo Pinilla Burgos Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

LA ANTROPOLOGÍA DE FRANCISCO GINER DE LOS RÍOS (EL PROBLEMA DEL HOMBRE). Con este título queremos reivindicar la figura de Giner de los Ríos como uno de los más grandes hitos de la historia del pensamiento español al anticipar teorías filosóficas, científicas, políticas, morales, legales que se desarrollarán en el siglo XX, ocupando en todos los casos el hombre y lo humano un puesto central: un hombre, en torno al cual se contextualiza el mundo ético del krausismo, en el que cada uno de nosotros está abocado al bien como deber vital. Así, concilia la autonomía del ciudadano con valores universales, desarrollando todo un sistema humanista racional, liberal y abierto a lo social. Aparecen en él conceptos como el de Persona Social, el respeto al tú que nos abre a la trascendencia. Se trataba de crear una nueva sociedad en el que el hombre es un ser de deberes y obligaciones. Todo ello deriva de su concepción del mundo, el hombre y la sociedad. Su filosofar, el realismo gineriano, parte de la intuición inmediata del Yo, desde el que llegará a la existencia del mundo real. Otro rasgo de su pensamiento es su modernidad: su objetivo es reformar las estructuras del país a través de la educación: el aspecto más conocido de su obra y cuyo punto de partida es su antropología. Así, desde su concepción del hombre como ser integral y orgánico, buscaba su transformación mediante la reforma interior. El resultado será esa transformación social (en un país tan necesitado de ella), un cambio de la persona no por la razón técnica sino moral: individuos libres en una sociedad que la garantiza. Con ello busca la creación de un pueblo adulto por medio de la aplicación de su concepto de Humanidad: todos los hombres comparten un mismo destino que debe realizarse en el respeto y amor a los demás como seres sociales. Llegamos así a su optimismo antropológico krausista y al panenteísmo: si Dios está en todos los seres, es necesario respeto hacia ellos, y sobre todo a su creación: la Naturaleza. En su búsqueda de una nación de hombres justos y virtuosos nos puso en contacto con el pensamiento europeo: introduce en nuestro país el krausopositivismo y los avances de la nueva ciencia que se desarrolla desde la segunda mitad del siglo XIX, limitados por la moral. Así completa su teoría de la armonía de las esferas, que contribuyen a la realización de los fines racionales. Podemos hablar de sincretismo en su pensamiento, en el que conviven armónicamente libertad, laicismo, europeización, ilustración, fe, ciencia y diversas teorías filosóficas que constituyen sus amplias influencias. Todo ello en la búsqueda de una sociedad desarrollada con unos valores que contrastan con la España del XIX. La Institución Libre de Enseñanza sería el intento de realizar la transformación del hombre, según unos valores de plena vigencia en el presente. Se trata de salir de la minoría de edad y llegar a la madurez de la sociedad mundial bajo el ideal de la armonía universal, idea erasmista de comunidad que rechaza actitudes ergotistas o antisociales. Y para ello es fundamental formar a los jóvenes, crear elites que hagan frente a los problemas sociales, que ennoblezcan la vida y regeneren el país, extendiendo los ideales humanistas a todo el pueblo con un compromiso social, y dar lugar a la aparición de la "sociedad para la ciencia". Con esto queremos demostrar cómo Giner impulsa el èthos de la civilidad, cuyo núcleo central reside en el imperativo categórico kantiano: hacer el bien por el bien mismo.