El salario familiar en la actuación política de la CEDA durante el segundo bienio de la segunda república1934-1935

Laburpena

La investigación pretende acercarse a la política laboral que promovió la C.E.D.A. desde las instituciones de la II República, fundamentalmente, en las Cortes republicanas y en los distintos Ministerios a los que accedieron los prohombres del partido durante el segundo bienio. Y se enfoca a partir de una de las “soluciones” que ofrecía el catolicismo de las primeras décadas del siglo XX a la cuestión social: el salario familiar, entendido como aquella retribución salarial que debía pagarse al obrero en su condición de padre de familia, según rezaban las encíclicas sociales de los Pontífices. Este principio no solo incluía en un plano ideal la mejora del salario nominal cuando esto fuese posible, sino también ámbitos como el impulso de subsidios contra el paro, los seguros sociales o el control y la participación en los beneficios de los obreros, etc. Todo ello con el objetivo último de favorecer el debate sobre hasta qué punto las políticas inspiradas en la cosmovisión católica del Hombre y de la sociedad hubieran podido coadyuvar a la estabilización del régimen republicano de haberse plasmado en la legislación. Máxime, teniendo en cuenta que, casi invariablemente, la C.E.D.A. ha sido estudiada por los especialistas –en realidad, su discurso y propaganda, pero casi nada sus propuestas políticas reales- desde el paradigma de la lucha de clases, pese a que el catolicismo político y social no pretendía insertarse en tal planteamiento ideológico y doctrinal.