Medición de concentraciones plasmáticas de antirretrovirales en niños con infección por el virus de la inmunodeficiencia humana tipo 1

  1. Nso Roca, Ana Pilar
Zuzendaria:
  1. María Isabel de José Gómez Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 2009(e)ko uztaila-(a)k 23

Epaimahaia:
  1. Francisco Javier Ruza Tarrio Presidentea
  2. F.J. Aracil Santos Idazkaria
  3. Maria Dolores Gurbindo Gutierrez Kidea
  4. José Luís Jiménez Fuentes Kidea
  5. J. T. Ramos Amador Kidea

Mota: Tesia

Laburpena

En 1981, se detectó en Nueva York y San Francisco un brote epidémico de una nueva infección1 producida por un virus desconocido hasta 1983, año en que se logró su aislamiento2-4. Se trataba de un nuevo retrovirus humano, no oncogénico. En los años 1983 y 1984, investigadores del Instituto Pasteur, del Instituto Nacional del Cáncer de EE.UU. y de la Universidad de California aislaron varias cepas de retrovirus en pacientes con SIDA y las denominaron LAV (virus asociado a linfadenopatía), HTLV-III (virus linfotrópico T humano tipo III) y ARV, respectivamente. Posteriormente, un comité internacional de taxonomía acuñó la denominación virus de la inmunodeficiencia humana tipo 1 (VIH-1). Un segundo retrovirus, similar pero antigénicamente distinto fue aislado en pacientes con SIDA en África occidental en 1986 y fue identificado como VIH-2. Era también capaz de producir en el hombre un cuadro clínico similar al del SIDA, pero su distribución geográfica era más limitada y era menos patogénico que el VIH-14