Una etnografia de la escritura mixe

  1. Sagi-Vela González, Ana
Dirigida por:
  1. Pedro Pitarch Ramón Director

Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 22 de febrero de 2021

Tribunal:
  1. Francisco Miguel Gil García Presidente
  2. Óscar Muñoz Morán Secretario
  3. Juan Antonio Flores Martos Vocal
  4. Gemma Celigueta Vocal
  5. Flavia Cuturi Vocal
Departamento:
  1. Historia de América y Medieval y Ciencias Historiográficas

Tipo: Tesis

Resumen

El objeto de esta tesis es la escritura del mixe, lengua de tradición oral hablada en el estado mexicano de Oaxaca. Con la finalidad de valorar la relevancia de este producto cultural en la sociedad mixe, investigo las transformaciones en la lengua y la cultura que provoca la adopción de esta tecnología a través del estudio de sus usos, sus formas y sus representaciones. Desde una perspectiva histórica y con un enfoque etnográfico, se atiende a las causas, los fines y los efectos de la escritura en la lengua y en la sociedad mixes. Las fuentes para el análisis las constituyen el material etnográfico recopilado en comunidades mixes entre 1996 y 2003 y todos los textos mixes producidos hasta hoy que estuvieron a mi alcance. Este material me ha permitido, por un lado, describir la trayectoria del proceso de normativización de la escritura mixe protagonizado por sus hablantes desde finales de la década de los setenta del siglo XX, analizando los usos de la escritura mixe y las formas que adopta el mixe escrito; por otro, valorar su impacto en las comunidades mediante el análisis de las actitudes y los comportamientos lingüísticos. Los resultados de la investigación confirman la hipótesis inicial sobre la génesis del proceso, esto es, que la iniciativa de escribir el mixe nace en un contexto institucional o académico fuera de las comunidades y se inscribe en la situación de subordinación de los pueblos indígenas a nivel político, social, económico y lingüístico que motivó los antecedentes de la escritura en esta lengua, pues de no darse la coyuntura que precipitó el trasvase de la lengua mixe a la escritura alfabética, es decir, la colonización y la imposición de una lengua con tradición escrita, los mixes no habrían expresado la necesidad de escribir su lengua como reivindicación política de un derecho lingüístico. Asimismo, constata que las razones que explican las divergencias en cuanto a la conformación de un alfabeto práctico son de índole ideológica, no lingüística, y responden a una relación de fuerzas entre los actores mixes involucrados en la sistematización de su lengua. De forma que a las funciones anteriormente atribuidas a la escritura mixe, en la evangelización y en la alfabetización, se une la función política en la recreación de la identidad étnica, donde la escritura mixe surge como terreno de disputa por el control de este recurso simbólico. La apropiación simbólica de espacios, formas y usos de la escritura hasta ahora reservados al español, el manejo de la escritura mixe por una elite cultural que reivindica la identidad étnica como base de la organización política y social de sus comunidades o la transformación de las actitudes lingüísticas hacia la lengua mixe son algunas de las implicaciones de la adopción de la escritura. A pesar de todo, se constata que el uso de la escritura en lengua mixe se encuentra restringido a los ámbitos donde se fija y transmite la norma escrita a través de políticas de planificación lingüística aplicadas por organismos institucionales o por agentes indígenas. En consecuencia, la escritura todavía no desempeña una función social que contribuya a desarrollarla y a extender su uso a toda la comunidad de hablantes. La socialización de la escritura mixe se ve obstaculizada por diversos factores con frecuencia interrelacionados, como son la restricción en cuanto a funciones y usuarios de la escritura, la ausencia de una forma estándar, la variedad dialectal, la desatención a todas las fases de la planificación lingüística o las resistencias a la innovación. En definitiva, la eficacia simbólica de la escritura, que actúa sobre el estatus de la lengua, prima sobre el sentido práctico de la escritura como instrumento de comunicación. La transformación de las actitudes hacia la lengua mixe provocada por las políticas lingüísticas emprendidas son prueba de ello, como también la emergencia de un grupo social cuyo poder reside en la facultad de manejar el uso de la nueva herramienta.