Análisis de los factores solubles angiogénicos en la enfermedad de Crohn

  1. Dueñas Pousa, Inés
Dirigida por:
  1. José Maté Jiménez Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 04 de noviembre de 2009

Tribunal:
  1. Amaro García Díez Presidente/a
  2. Ricardo Moreno Otero Secretario/a
  3. José María Ladero Quesada Vocal
  4. Yago González Lama Vocal
  5. Juan Luis Mendoza Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La angiogénesis, o la formación de nuevos vasos sanguíneos a partir de otros preexistentes, es un proceso íntimamente relacionado con la inflamación y la fibrosis. Por su parte, la enfermedad de Crohn (EC) se caracteriza por inflamación crónica, ulceración y regeneración de la mucosa del intestino y puede manifestarse fenotípicamente con un comportamiento inflamatorio, estenosante o fistulizante. Por ello, nuestra hipótesis fue evaluar si los mediadores angiogénicos solubles difieren entre pacientes con EC en remisión y controles sanos, y según el patrón fenotípico en los pacientes con EC. Con este fin se estudiaron 70 pacientes con EC en remisión divididos en tres grupos según su patrón de evolución (inflamatorio, estenosante y fistulizante); y 44 controles sanos. Mediante ELISA, se determinaron las concentraciones séricas de diversos factores angiogénicos: factor de crecimiento del endotelio vascular (VEGF) y el factor de crecimiento placentario (PlGF), y su receptor común (VEGFR1), las angiopoietinas (Ang1 y Ang2) y su receptor común (Tie2). Se observaron diferencias estadísticamente significativas cuando se compararon los niveles de mediadores angiogénicos en pacientes con EC en remisión y controles sanos. Esto podría sugerir que la activación del proceso angiogénico en estos pacientes no está únicamente ligada a la inflamación. El proceso angiogénico podría ser por sí solo una consecuencia de la enfermedad y a su vez la causa, debido a una retroalimentación entre los procesos de inflamación crónica y angiogénesis. Asimismo, cuando se analizaron las concentraciones séricas de los factores angiogénicos en los pacientes con EC en función de sus patrones fenotípicos no se observaron diferencias estadísticamente significativas. A partir de estos resultados podría cuestionarse el uso de los niveles séricos de los factores angiogénicos como posibles marcadores biológicos, que ayudasen a estratificar el comportamiento de la enfermedad y seleccionar de forma precoz el tratamiento más adecuado. No obstante, debido a que se observó una tendencia a una mayor concentración del VEGF y de la Ang2 en pacientes con un patrón fenotípico estenosante, son necesarios futuros estudios con una mayor cohorte de pacientes.