Actuación del laboratorio clínico para la mejora del manejo del déficit de vitamina B12 en atención primaria

Resumen

El déficit de vitamina B12 es una entidad que pasa muchas veces desapercibida, ya que las manifestaciones clínicas aparecen tras bastante tiempo de un aporte insuficiente. Su diagnóstico se basa en la confirmación analítica de valores por debajo del límite de referencia. El déficit de vitamina B12 afecta en su mayoría a población mayor debido a la atrofia gástrica predominante en dicho rango de edad .El déficit de vitamina B12 puede tener complicaciones potencialmente graves e incluso, en ciertos casos, irreversibles. El diagnóstico a tiempo puede revertir ciertos síntomas y signos, con un tratamiento adecuado, el cual, además, no provoca efectos adversos. Bajo estas premisas parece necesario abordar lo antes posible, la mejora de aquellos casos de déficit que se dilatan en el tiempo sin una solución acorde. Los errores asistenciales suceden a lo largo de toda la cadena asistencial e implican riesgos potencialmente graves para el paciente. Existen múltiples barreras que dificultan el intercambio de información clínica, como la descentralización de servicios médicos y la inadecuada comunicación interprofesional. Se debe buscar estrategias y estructuras de comunicación que mejore esta interfaz del servicio asistencial con el objetivo de brindar un mejor servicio al paciente y reducir los errores. A través del análisis de las características demográficas y analíticas de los déficits encontrados en la población de estudio, se consigue determinar el perfil analítico que identifican a los déficits. El perfil corresponde principalmente a mujeres mayores de 70 años con anemia y macrocitosis. Estableciendo estrategias de mejora desde el laboratorio se ha conseguido ayudar al clínico a aumentar la captación y diagnóstico de los déficits de vitamina B12 detectados en el laboratorio, así como a mejorar el manejo del paciente con déficit. Esto se consigue a través de acciones que ayudan a reducir el tiempo de instauración de tratamiento y mejorar el seguimiento de estos pacientes. En definitiva, se consigue un mejor control del déficit de vitamina B12 en atención primaria y reducción de las complicaciones y riesgos en el paciente, mejorando su seguridad.