La industria fabril en Castilla y León durante el primer franquismo (1939-1959)

  1. ÁLVAREZ MARTÍN, MARÍA MONTSERRAT
Dirigida por:
  1. Juan Helguera Quijada Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Valladolid

Fecha de defensa: 19 de mayo de 2005

Tribunal:
  1. Ángel García Sanz Presidente/a
  2. Javier Moreno Lázaro Secretario/a
  3. Santiago García López Vocal
  4. Francisco Comín Vocal
  5. Elena Cristina San Román López Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 126678 DIALNET

Resumen

La hipótesis principal de la Tesis es que la política industrial del primer franquismo primó a las industrias de bienes de equipo sobre las industrias de bienes de consumo tradicionales, a pesar de que estas últimas eran las que mayores ventajas comparativas tenían en Castilla y León. En relación con esta cuestión se destacan otras dos, que durante el primer franquismo no hubo cambios sustanciales en la distribución espacial del período precedente y que el INI no llevó a cabo una política industrial regional en Castilla y Léon. Tras el análisis de la política industrial franquista y de los sectores alimentario, textil, químico y metalúrgico de la región, se constata que la política intervencionista del primer franquismo distorsionó la estructura industrial como consecuencia de las presiones a que se encontraron sujetas las decisiones administrativas para la instalación, ampliación o traslado de empresas derivadas de las leyes interventoras de la industria de 1939. El resultado fue la canalización de recursos, con independiencia de los mecanismos de mercado, hacia las industrias básicas y de bienes de equipo que tuvieron un trato de preferencia a la hora de realizar importaciones, disponer de materias primas, energía y maquinaria, en detrimento de las industrias de bienes de consumo tradicionales. El proceso de industrialización en la región se produjo de forma parcial y localizada en algunos núcleos urbanos, en concreto en Valladolid, León y Burgos, consolidándose los desequilibrios espaciales del período precedente. Los sectores elegidos por el INI para intervenir en las zonas atrasadas como Castilla y León, no crearon el empleo necesario para frenar los procesos de emigración, ni fueron los más adecuados para impulsar su industrialización y disminuir las disparidades regionales. El mantenimiento de instalaciones de la industria de transformación del INI en la región no tuvo más justificación