La pervivencia del comunal en la transición a una economía capitalista, León (1800-1936)

Resumen

En León, los comunales, especialmente los montes, sometidos a una estricta regulación tradicional y a variados aprovechamientos, eran la base sobre la que descansaba el sistema agrario. A partir del siglo XIX, a partir de las reformas agrarias liberales, las propiedades comunales fueron sometidas a una importante presión ya que se buscaba su liberalización y que los montes de los pueblos estuviese supervisada por la Administración Forestal creada a tal efecto. En esta tesis se analiza como, a pesar de esta presión y a diferencia de lo ocurrido en otras partes de España, los pueblos no sólo conservaron (y en algunos casos aumentaron) sus propiedades colectivas, sino que se mantuvieron los usos tradicionales en el monte. Uno de los factores que explica la pervivencia del comunal fueron las estrategias puestas en marcha por el campesinado para defender propiedades y usos comunales. Detrás de esta diversidad de formas de protesta, como la lucha legal contra la venta de los comunales, el rechazo a la Administración forestal o la compra colectiva de montes que las comunidades vecinales habían venido utilizando, se constata la existencia de una ""economía moral que justificaba estas estrategias. Es decir, al defender los comunales se estaba defendiendo un modo de reproducción económica y social que dependía de los comunales y que el Estado hacía peligrar. También se estaba defendiendo una ""cultura"" y un modo de vida, por lo que a pesar de todos los esfuerzos del Estado por hacer de la propiedad el eje sobre el que habían de girar las relaciones sociales, en esta tesis se defiende que el capitalismo tardó en imponerse en la mayoría de comarcas leonesas porque fue duramente resistido.