Tratamiento quirúrgico de las deformidades digitales de los pies, artroplastia & cirugía mínimamente invasiva

  1. Izquierdo Cases, Joaquín Óscar
Dirigida por:
  1. Pedro Guillén García Director
  2. Marta Guillen Vicente Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad Católica San Antonio de Murcia

Fecha de defensa: 13 de diciembre de 2007

Tribunal:
  1. Andrés Martínez-Almagro Andreo Presidente/a
  2. Ricardo Becerro de Bengoa Vallejo Secretario
  3. Antonio Oller Asensio Vocal
  4. M. Clavel-Sáinz Nolla Vocal
  5. Marta Elena Losa Iglesias Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 184042 DIALNET

Resumen

Las deformidades digitales de los dedos menores engloban a un grupo complejo de alteraciones del pie que actualmente supone uno de los principales motivos de consulta. Estas deformidades pueden afectar a las articulaciones interfalángicas proximales, a las articulaciones interfalángicas distales, a las articulaciones metatarsofalángicas así como a las estructuras ligamentosas y tendinosas relacionadas con estas articulaciones. A pesar de todos estos factores la disfunción biomecánica, bien adquirida, bien congénita, es el factor etiológico más importante de la deformidad digital de los dedos menores. La preocupación de la sociedad actual hacia diferentes aspectos relacionados con cualquier tipo de intervenciones y particularmente con las operaciones digitales de los pies, manifiesta abiertamente la ansiedad expectante ante la anestesia y ante los resultados finales por el tiempo que se ha estar de baja laboral, por la posibilidad de valerse para deambular y realizar los procesos diarios elementales, y sobre todo por la extendida creencia de que las operaciones en los pies son especialmente dolorosas; y por otra parte las expectativas que los nuevos medios técnicos y metodológicos han abierto con la cirugía mínimamente invasíva que trata de dar respuesta a las cuestiones sociales planteadas de manera más llevadera, se presenta un nuevo campo de acción para la cirugía digital hasta el punto de que está siendo masivamente demandada ante la extendida creencia de que con ella quedan minimizadas, cuando no superadas todas las dudas y puntos negativos encontrando en las técnicas quirúrgicas utilizadas con anterioridad. Las hipotéticas ventajas de intervenir las deformidades digitales por cirugía minimamente invasíva que insistentemente preconizan los impulsores de estas técnicas, nos ha llevado a plantearnos las siguientes hipótesis: La cirugía minimamente invasíva realizada en los dedos menores, es menos dolorosa, genera menos complicaciones, permite una incorporación más rápida a la vida laboral y tiene un mayor grado de satisfacción de los pacientes, que los intervenidos con cirugía abierta. La controversia sobre que procedimiento es el mejor considerado por los pacientes, o cual de ellos permite incorporarse antes al trabajo y cuales son las complicaciones más habituales que nos podemos encontrar en la evolución postquirúrgica, nos ha motivado al desarrollo del presente trabajo de investigación, dando lugar a los siguientes objetivos: Para la consecución de estos objetivos utilizamos el siguiente material y metodología. Conocer si la cirugía minimamente invasiva aplicada en los dedos menores es menos dolorosa que los intervenidos con cirugía abierta. Saber si el grado de satisfacción funcional, estética y de alineamiento de los pacientes intervenidos con cirugía minimamente invasiva es mayor que los intervenidos con cirugía abierta. Conocer si la cirugía minimamente invasiva genera menos complicaciones que los intervenidos con cirugía abierta. Saber si los pacientes intervenidos con cirugía minimamente invasiva tienen un mayor grado de satisfacción que los intervenidos con cirugía abierta. Saber si la cirugía minimamente invasiva permite la incorporación más rápida a la vida laboral que los intervenidos con cirugía abierta. Para la consecución de estos objetivos utilizamos el siguiente material y metodología. Se seleccionaron 20 pacientes en cada clínica con dedos en martillo rígidos, tras reunir los criterios de inclusión, y no estar afectos por los criterios de exclusión. En el análisis de los datos se han utilizado métodos de estadística descriptiva y contrastes de hipótesis. Los datos referidos a variables de tipo categórico se han resumido mediante tablas de frecuencias y gráficos de barras. Convenientemente segmentados según el tipo de cirugía aplicada. Para contrastar la asociación o independencia entre variables categóricas se ha utilizado el contraste de la Chi-cuadrado. Los datos recogidos sobre variables de tipo cuantitativo se han resumido mediante medidas descriptivas de posición central y de variabilidad. Para la representación gráfica se han utilizado histogramas. La contrastación de las diferencias entre las dos técnicas quirúrgicas basadas en variables cuantitativas se ha realizado mediante el contraste de la t de Student para muestras independientes. La cirugía minimamente invasiva aplicada en los dedos menores es más dolorosa que los intervenidos por artroplastia hasta transcurridos tres meses de la intervención. No hay evidencia de que haya diferencias significativas en el grado de satisfacción, tanto funcional como estético, que los pacientes manifiestan tras someterse a cualquiera de las dos técnicas quirúrgicas estudiadas. Con respecto al alineamiento si hemos encontrado evidencia de mejores valoraciones AOFAS cuando se aplica cirugía minimamente invasiva. Podemos decir que con la cirugía minimamente invasiva hay mayor incidencia contrastada estadísticamente de hematoma local, inflamación y dolor, que se concentra en las primeras semanas tras la intervención, y que a partir de ese momento, la diferencia entre la aparición de las distintas complicaciones con cada una de las técnicas no es significativa. Pero parece que hay mayor propensión a sufrir desviaciones del dedo en el plano transverso y dedo flotante con la cirugía abierta. No encontramos diferencias significativas entre los grados de satisfacción global de los pacientes con ambas técnicas a los seis meses de la intervención. El tiempo transcurrido desde la intervención hasta que el paciente es dado de alta para su incorporación a su vidad laboral, podemos decir que con un nivel de confianza del 95% no se encuentran diferencias significativas entre el numero de dias que se faltan a la ocupación habitual con cada una de las técnicas quirúrgicas.