Genes asociados a displasias esqueléticas. Diagnóstico e implicación en el asesoramiento genético (1998-2012)

  1. Fenollar Cortés, María del Mar
Dirigida por:
  1. María José Trujillo Tiebas Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 22 de enero de 2016

Tribunal:
  1. Antonio Pérez Aytés Presidente/a
  2. Francisco Javier Pérez Arranz Secretario/a
  3. Cristina González González Vocal
  4. Karen J. Heath Vocal
  5. Manuel Arroyo Fernández Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Las displasias esqueléticas son un amplio campo de estudio que requiere unidades disciplinares de las distintas especialidades involucradas en su desarrollo. Esta tesis, basada en un trabajo principalmente asistencial, ha intentado dar respuesta al mayor número de demandas solicitantes de displasias esqueléticas recogidas en dos periodos: desde su inicio a 2006, y tras la concesión de un proyecto específico, de 2007 a 2012. En ese intento se han puesto a punto nuevos genes y nuevas herramientas diagnósticas que han permitido caracterizar mutaciones familiares que han facilitado la realización de un asesoramiento genético individual, familiar y reproductivo, fin último del estudio genético. Ante alteraciones ecográficas el gen FGFR3 juega un papel importante en el diagnóstico, con una sensibilidad de hasta el 60% en los fetos con hipoplasia torácica y micromelia. El estudio de las craneosinostosis aisladas sindrómicas requiere de un primer cribado del exón 7 del gen FGFR3 así como de los exones 7 y 8 del gen FGFR2, seguido de la aplicación de la secuenciación masiva en una segunda aproximación diagnóstica. El estudio de la talla baja disarmónica requiere de la secuenciación seriada del gen FGFR3, gen SHOX y gen COMP. Existen otras tallas bajas disarmónicas con fenotipos característicos reconocibles que dirigen el estudio molecular de forma concreta (genes RMRP y COMP). La puesta a punto del gen SLC26A2 se realizó ante un resultado molecular no concluyente en una pareja y su hija afecta. El estudio de la talla baja idiopática se centra en las alteraciones en el gen SHOX. La selección de los pacientes y la aplicación de una escala clínica que cribe los pacientes a estudio es necesaria para optimizar recursos y expectativas diagnósticas. Una buena exploración y recogida de datos, así como dar una explicación detallada de las alteraciones encontradas, es un requisito imprescindible para orientar el estudio molecular y, ante un primer resultado negativo, tener la información para poder proponer otros diagnósticos diferenciales. Esta premisa es independiente de la técnica molecular que se utilice: desde la robusta y conocida secuenciación de sanger hasta las nuevas herramientas diagnósticas de secuenciación masiva.